1971bullet
Forer@ Senior
Sin verificar
Hola a todos compañeros.
Quiero presentaros al último amiguete que ha llegado a casa. Un precioso Ball Engineer Hydrocarbon Spacemaster.
Ante todo dar unos cuantos datos técnicos del reloj:
Calibre ETA 2836-2, cronómetro certificado COSC
Funciones: Horas, minutos, segundos, día de la semana y fecha.
29 microtubos de gas de tritio en agujas de hora, minutos, segundos y esfera para una inmejorable legibilidad nocturna.
Caja: Acero inoxidable con bisel giratorio unidireccional luminiscente.
Diámetro 41,5 mm, altura 16,1 mm.
Cristal de zafiro de 4 mm con tratamiento antirreflectante.
Sistema patentado de protección de la corona (a rosca además...).
Estanqueidad hasta 333 m.
Antimagnético hasta 12.000 A/m.
Resistente a los choques: supera una prueba de choques de 7.500 G (Ni lo he probado ni pienso hacerlo).
Esfera: Negra, texturizada.
Hasta aquí todo bien, la verdad es que controlando su marcha durante una semana, se encuentra en +3-4 seg/día. No está mal.
Los datos técnicos pueden gustar, asombrar o disgustar, pero lo que realmente me ha resultado peculiar de este reloj es la calidad que transmite, las sensaciones que más allá de los datos "sin alma" traspasan de su máquina a tu muñeca.
La primera peculiaridad que me llamó la atención es su presencia. Lejos de aparentar 41'5 mm. parece más un 43. Quizá es por su grosor (considerable) o por su exclusivo sistema de protección de la corona (patentado) que le hace aparentar mayor.
Todo ello, en línea con el resto del reloj, transmite una calidad de acabados, que si bien podríais pensar que es algo subjetivo, os aseguro que nada más lejos de la realidad. Esta pieza destila calidad por los cuatro costados.
Por cierto, una vez liberado el sistema de protección de la corona y desenroscada de su posición, es un placer dar cuerda a este reloj... No se como describirlo... Al hacerlo notas como su muelle gira, pero de una forma sedosa, suave, sin traqueteos ni brusquedades, ni puntos muertos... no se si me explico...
Todos y cada uno de los mecanizados del reloj están realizados con la más esmerada factura, mostrando detalles que denotan robustez y afán de durabilidad, como buen reloj-instrumento para ser usado en cualquier tipo de situación adversa. Su caja cepillada, el caucho (o brazalete de acero superlativo...) van atornillados con doble tornillo a la caja.
El caucho es de lo más cómodo que he probado, con un estriado similar a los cauchos Oris, pero mejor acabado, incluyendo la marca pero de forma elegante, sin hacer ostentación de la misma. Discreto, elegante y funcional, con un ajuste perfecto a la caja.
Lo mires por donde lo mires...
Una vez que le damos la vuelta, vemos un precioso fondo ciego roscado, decorado con una espectacular imagen de un piloto. No olvidemos que este reloj ha estado en el espacio!!!
Os aseguro que el nivel es espectacular. Casi diría que al mismo del hipocampo del Planet Ocean...
La hebilla, sin ser nada del otro jueves, tiene un acabado estupendo, con doble nivel en el centro y logo aplicado. Al igual que el resto del reloj, acabado cepillado. Ajuste estupendo, ergonómica y de fácil manipulación.
De nuevo en el frente, podemos observar que el bisel (unidireccional de 120 pasos) lleva las típicas marcas de un reloj de buceo, minutos los primeros quince y luego cada cinco, con numerales a los 15, 30 y 45. Todas las marcas del bisel han sido horadadas en el cuerpo del mismo y rellenas con material luminiscente (muy potente). Me parece notar que el tratamiento antirreflejos es solo interior, por la dificultad de fotografiarlo en condiciones sin brillos.
La verdad que exceptuando el momento de hacer la foto (que con un polarizador se habría solucionado...) no lo echo de menos, por aquello de los arañazos.
Ya dentro de la esfera observamos una serie de detalles que no hacen más que acentuar la percepción de calidad general de esta pieza. Desde el segundero con ese gran logo en la cola, reminiscencia de otras épocas, hasta el texturizado de la esfera propiamente dicha, en su mitad exterior, recogiendo los indices horarios y números, formados por los famosos tubos de gas de tritio.
En este sentido, me gustaría remarcar que la luminosidad de estos tubos no es ni de lejos tan estridente como algunos dicen (incluso la misma marca hace alarde de ello).
Es una luminosidad ténue, de percepción progresiva y eso si... constante. Me explico. Una vez las condiciones de luz ambiente van disminuyendo, la percepción de la luminosidad de las marcas del reloj va aumentando. En las fotos, que son tomadas a última hora de la tarde se puede comprobar como los números, que durante el día tienen un color blanco como el resto de las marcas de la esfera, ahora comienzan a tornarse de un ligero tono amarillo...
Y así continúa progresivamente hasta su momento de máximo esplendor, que es sobre las 4 de la mañana, cuando me levanto a... bueno... a desbeber
Pero que nadie se asuste con tanto colorín. Lejos de resultar "cantoso", la diferencia de luminosidad del bisel y de las marcas de la esfera, le dan un atractivo toque tridimensional a la iluminación del reloj.
Perfectamente legible en condiciones de poca luz, pero nada demasiado llamativo. Aquí os pongo una foto con un conocido del foro, que tiene uno de los mejores materiales luminiscentes que he visto, ambos con la misma estimulación (unas tres horas en la muñeca, por la tarde).
¿A que ya no parece tan "Faro de Alejandría" como podría suponerse? El otro si que relumbra y centellea... al menos las primeras cuatro horas de oscuridad, luego decae ligeramente, mientras el Ball se mantiene igual, sea la hora que sea...
Por cierto, ¿habéis adivinado quién es el compañero de la comparativa?
Pues uno de mis favoritos y bien conocido en el foro...
En fin, que estoy muy contento con este reloj. Me ha sorprendido muy gratamente y espero disfrutarlo durante mucho tiempo. De hecho ya he comprado el brazalete de acero (espectacular!!!) así que en un mes aproximadamente habrán más fotos...
Gracias a todos por leer este tostón (el que lo haya leído) y si tenéis cualquier comentario al respecto, me encantará recibirlo.
Quiero presentaros al último amiguete que ha llegado a casa. Un precioso Ball Engineer Hydrocarbon Spacemaster.
Ante todo dar unos cuantos datos técnicos del reloj:
Calibre ETA 2836-2, cronómetro certificado COSC
Funciones: Horas, minutos, segundos, día de la semana y fecha.
29 microtubos de gas de tritio en agujas de hora, minutos, segundos y esfera para una inmejorable legibilidad nocturna.
Caja: Acero inoxidable con bisel giratorio unidireccional luminiscente.
Diámetro 41,5 mm, altura 16,1 mm.
Cristal de zafiro de 4 mm con tratamiento antirreflectante.
Sistema patentado de protección de la corona (a rosca además...).
Estanqueidad hasta 333 m.
Antimagnético hasta 12.000 A/m.
Resistente a los choques: supera una prueba de choques de 7.500 G (Ni lo he probado ni pienso hacerlo).
Esfera: Negra, texturizada.
Hasta aquí todo bien, la verdad es que controlando su marcha durante una semana, se encuentra en +3-4 seg/día. No está mal.
Los datos técnicos pueden gustar, asombrar o disgustar, pero lo que realmente me ha resultado peculiar de este reloj es la calidad que transmite, las sensaciones que más allá de los datos "sin alma" traspasan de su máquina a tu muñeca.
La primera peculiaridad que me llamó la atención es su presencia. Lejos de aparentar 41'5 mm. parece más un 43. Quizá es por su grosor (considerable) o por su exclusivo sistema de protección de la corona (patentado) que le hace aparentar mayor.
Todo ello, en línea con el resto del reloj, transmite una calidad de acabados, que si bien podríais pensar que es algo subjetivo, os aseguro que nada más lejos de la realidad. Esta pieza destila calidad por los cuatro costados.
Por cierto, una vez liberado el sistema de protección de la corona y desenroscada de su posición, es un placer dar cuerda a este reloj... No se como describirlo... Al hacerlo notas como su muelle gira, pero de una forma sedosa, suave, sin traqueteos ni brusquedades, ni puntos muertos... no se si me explico...
Todos y cada uno de los mecanizados del reloj están realizados con la más esmerada factura, mostrando detalles que denotan robustez y afán de durabilidad, como buen reloj-instrumento para ser usado en cualquier tipo de situación adversa. Su caja cepillada, el caucho (o brazalete de acero superlativo...) van atornillados con doble tornillo a la caja.
El caucho es de lo más cómodo que he probado, con un estriado similar a los cauchos Oris, pero mejor acabado, incluyendo la marca pero de forma elegante, sin hacer ostentación de la misma. Discreto, elegante y funcional, con un ajuste perfecto a la caja.
Lo mires por donde lo mires...
Una vez que le damos la vuelta, vemos un precioso fondo ciego roscado, decorado con una espectacular imagen de un piloto. No olvidemos que este reloj ha estado en el espacio!!!
Os aseguro que el nivel es espectacular. Casi diría que al mismo del hipocampo del Planet Ocean...
La hebilla, sin ser nada del otro jueves, tiene un acabado estupendo, con doble nivel en el centro y logo aplicado. Al igual que el resto del reloj, acabado cepillado. Ajuste estupendo, ergonómica y de fácil manipulación.
De nuevo en el frente, podemos observar que el bisel (unidireccional de 120 pasos) lleva las típicas marcas de un reloj de buceo, minutos los primeros quince y luego cada cinco, con numerales a los 15, 30 y 45. Todas las marcas del bisel han sido horadadas en el cuerpo del mismo y rellenas con material luminiscente (muy potente). Me parece notar que el tratamiento antirreflejos es solo interior, por la dificultad de fotografiarlo en condiciones sin brillos.
La verdad que exceptuando el momento de hacer la foto (que con un polarizador se habría solucionado...) no lo echo de menos, por aquello de los arañazos.
Ya dentro de la esfera observamos una serie de detalles que no hacen más que acentuar la percepción de calidad general de esta pieza. Desde el segundero con ese gran logo en la cola, reminiscencia de otras épocas, hasta el texturizado de la esfera propiamente dicha, en su mitad exterior, recogiendo los indices horarios y números, formados por los famosos tubos de gas de tritio.
En este sentido, me gustaría remarcar que la luminosidad de estos tubos no es ni de lejos tan estridente como algunos dicen (incluso la misma marca hace alarde de ello).
Es una luminosidad ténue, de percepción progresiva y eso si... constante. Me explico. Una vez las condiciones de luz ambiente van disminuyendo, la percepción de la luminosidad de las marcas del reloj va aumentando. En las fotos, que son tomadas a última hora de la tarde se puede comprobar como los números, que durante el día tienen un color blanco como el resto de las marcas de la esfera, ahora comienzan a tornarse de un ligero tono amarillo...
Y así continúa progresivamente hasta su momento de máximo esplendor, que es sobre las 4 de la mañana, cuando me levanto a... bueno... a desbeber
Pero que nadie se asuste con tanto colorín. Lejos de resultar "cantoso", la diferencia de luminosidad del bisel y de las marcas de la esfera, le dan un atractivo toque tridimensional a la iluminación del reloj.
Perfectamente legible en condiciones de poca luz, pero nada demasiado llamativo. Aquí os pongo una foto con un conocido del foro, que tiene uno de los mejores materiales luminiscentes que he visto, ambos con la misma estimulación (unas tres horas en la muñeca, por la tarde).
¿A que ya no parece tan "Faro de Alejandría" como podría suponerse? El otro si que relumbra y centellea... al menos las primeras cuatro horas de oscuridad, luego decae ligeramente, mientras el Ball se mantiene igual, sea la hora que sea...
Por cierto, ¿habéis adivinado quién es el compañero de la comparativa?
Pues uno de mis favoritos y bien conocido en el foro...
En fin, que estoy muy contento con este reloj. Me ha sorprendido muy gratamente y espero disfrutarlo durante mucho tiempo. De hecho ya he comprado el brazalete de acero (espectacular!!!) así que en un mes aproximadamente habrán más fotos...
Gracias a todos por leer este tostón (el que lo haya leído) y si tenéis cualquier comentario al respecto, me encantará recibirlo.
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