Sera
Milpostista
Sin verificar
Voy a contar una historia inventada. Hace años conocí a una persona con ansiedad, tenía trabajo, novia, amigos, pero cayó en las redes de esta enfermedad.
Su madre viendo que estaba triste le regaló un reloj de bolsillo de su abuelo, no funcionaba pero al abrirlo y ver con detenimiento esa maquinaria se enamoró de esos relojes.
Empezó a comprar relojes de bolsillo, la búsqueda y la espera le alejaban los pensamientos que le traían la ansiedad. Así se hizo con una modesta colección y su familia a pesar de ver absurda esa afición estaba contenta por él.
La ansiedad fue remitiendo con ayuda de familiares, pareja y psiquiatra, los amigos se quedaron en el camino.
Todo iba bien hasta hace un par de años, en el que la ansiedad volvió. Ahora volverá a intentar salir de aquello.
Gracias por escuchar esta historia totalmente inventada.
Su madre viendo que estaba triste le regaló un reloj de bolsillo de su abuelo, no funcionaba pero al abrirlo y ver con detenimiento esa maquinaria se enamoró de esos relojes.
Empezó a comprar relojes de bolsillo, la búsqueda y la espera le alejaban los pensamientos que le traían la ansiedad. Así se hizo con una modesta colección y su familia a pesar de ver absurda esa afición estaba contenta por él.
La ansiedad fue remitiendo con ayuda de familiares, pareja y psiquiatra, los amigos se quedaron en el camino.
Todo iba bien hasta hace un par de años, en el que la ansiedad volvió. Ahora volverá a intentar salir de aquello.
Gracias por escuchar esta historia totalmente inventada.