Pues eso no es nada
El mes de julio me dieron el nuevo coche, un Megane ranchera azul, y nos fuimos de vacaciones en Agosto.
Debe ser que a mi santa no le acabó de gustar, porque cada vez que se bajaba del mio para cualquier compra intentaba subirse a cualquier ranchera azul que estuviera por allí, menos la mia, y una vez lo logró y se subió a un Peugeot 307, azul y ranchera, estando yo aparcado tres coches más atras.
Fue un auténtico poema ver la cara del conductor, que estaba esperando a su santa, como yo, al ver que le entraba una chiflada, se sentaba, cerraba la puerta, y no paraba de hablar, sin darse cuenta que no era yo el conductor.
Cuando se dio cuenta se bajó y me buscó, mas cortada que un fleco.
La pena es que me cerraron y no pude arrancar cuando se metió en el otro coche, que si no me escapo
Cuando pasé al lado del otro coche le dije que no se preocupara que ya me la llevaba y echamos unas risas
También era para verla otro par de veces esperando junto a otro coche oscuro, que no era ni azul pero si ranchera, a que le abriera la puerta, lloviendo (verano en Asturias), y dandome la chapa porque no abría la puerta, estando yo metido en mi coche para no mojarme