AbderramanII
Reina Mora
Sin verificar
Hello everybody!! Todos aquí sabemos que nuestros automáticos no se cargan con el pulso, sino con airosos movimientos de muñeca Obviamente, hay diversas actividades que sirven a tal efecto y hoy vengo a mostraros una de ellas con muuuuucho gusto: preparar un pilpil
Como el guardabosques nos tiene olvidados y muertos de hambre, he pensado en compartir esta reunión gastro-relojera para ver si le abro el apetito, se pica, y se anima a darme la réplica como él sabe Va por uzté, maestro
La cita era en un txoko (disclaimer por el servicio de mesa y todos esos detalles tan agradables que nos prestan en los restaurantes y que aquí, sencillamente, no existen) y el menú un clásico de nuestra tierra. A mí siempre me parece una gozada comer “lo de toda la vida”, pero es que ayer, además, teníamos en el grupo un par de finlandeses que visitaban Bilbao por primera vez y la idea era que conocieran elementos esenciales de nuestra cultura gastronómica.
Algo de picar, para ir abriendo boca
Uno de los exponentes más clásico de la gastronomía bizkaitarra, el pil-pil, desde el principio. En esta ocasión, con callos y kokotxas de bacalao. Preparación del producto...
... Y también de la cazuela (de barro y bien calentada poco a poco al fuego) con el aceite y los ajos
Y una vez bien caliente el aceite, retirada la cazuela del fuego, ahora es cuando viene el paso a paso prometido en el título Se sumerge el bacalao y, aunque parece fácil, hace falta buena mano para que vaya soltanto su gelatina y se emulsione con el aceite haciando un buen pilpil. No puedo garantizar que siguiendo el paso a paso mostrado os quede la salsa como a mi amigo, pero sí que os garantizo que dejaréis a tope la reserva de marcha del automático que llevéis en la muñeca, porque lleva un rato de meneíto. Como veréis, en este caso, fue un Mako Pepsi el que se cargó mientras mecía la cazuela
Et voilà!! Pilpil listo para degustar y reloj con la reserva de marcha a tope. No me digáis que no es un win-win de manual
A continuación unos verdeles fresquísimos pasados por la plancha
Y, cómo no, un poco de carne, que estaba excepcional. Tal vez su aspecto no os parezca desmpampanante, pero os aseguro que de lo mejorcito en sabor que he comido nunca
La bodega, variadita: Los blancos, con representación local, catalana y andaluza…
… y los tintos, con representación española, portuguesa y francesa
Y para terminar unas cremosísimas tartitas de queso acompañadas con un vinito de vendimia tardía local
Mi acompañante para la velada fue un Zodiac Olympos, aka Batman (por la similitud de su peculiar caja con la silueta de la cabeza del superhéroe). Es un modelo de la Zodiac de principios de los años 60 que recientemente ha sido objeto de reedición. Por si alguien tiene curiosidad sobre él, os dejo el enlace al hilo en el que lo presenté: https://relojes-especiales.com/threads/el-primer-misterioso-de-la-zodiac-el-olympos.443725/
Y también os muestro el resto de la representación relojera digna de tal nombre
El resto eran smartwatches
Y llegados a este punto, dejamos el resto de la la noche en manos de los profesionales, que hay que alimentar el ambiente de la ciudad
Bueno, querido vilobi, confío en despertarte… como mínimo el apetito
Gracias y saludos a todos los que habéis llegado hasta aquí
Como el guardabosques nos tiene olvidados y muertos de hambre, he pensado en compartir esta reunión gastro-relojera para ver si le abro el apetito, se pica, y se anima a darme la réplica como él sabe Va por uzté, maestro
La cita era en un txoko (disclaimer por el servicio de mesa y todos esos detalles tan agradables que nos prestan en los restaurantes y que aquí, sencillamente, no existen) y el menú un clásico de nuestra tierra. A mí siempre me parece una gozada comer “lo de toda la vida”, pero es que ayer, además, teníamos en el grupo un par de finlandeses que visitaban Bilbao por primera vez y la idea era que conocieran elementos esenciales de nuestra cultura gastronómica.
Algo de picar, para ir abriendo boca
Uno de los exponentes más clásico de la gastronomía bizkaitarra, el pil-pil, desde el principio. En esta ocasión, con callos y kokotxas de bacalao. Preparación del producto...
... Y también de la cazuela (de barro y bien calentada poco a poco al fuego) con el aceite y los ajos
Y una vez bien caliente el aceite, retirada la cazuela del fuego, ahora es cuando viene el paso a paso prometido en el título Se sumerge el bacalao y, aunque parece fácil, hace falta buena mano para que vaya soltanto su gelatina y se emulsione con el aceite haciando un buen pilpil. No puedo garantizar que siguiendo el paso a paso mostrado os quede la salsa como a mi amigo, pero sí que os garantizo que dejaréis a tope la reserva de marcha del automático que llevéis en la muñeca, porque lleva un rato de meneíto. Como veréis, en este caso, fue un Mako Pepsi el que se cargó mientras mecía la cazuela
Et voilà!! Pilpil listo para degustar y reloj con la reserva de marcha a tope. No me digáis que no es un win-win de manual
A continuación unos verdeles fresquísimos pasados por la plancha
Y, cómo no, un poco de carne, que estaba excepcional. Tal vez su aspecto no os parezca desmpampanante, pero os aseguro que de lo mejorcito en sabor que he comido nunca
La bodega, variadita: Los blancos, con representación local, catalana y andaluza…
… y los tintos, con representación española, portuguesa y francesa
Y para terminar unas cremosísimas tartitas de queso acompañadas con un vinito de vendimia tardía local
Mi acompañante para la velada fue un Zodiac Olympos, aka Batman (por la similitud de su peculiar caja con la silueta de la cabeza del superhéroe). Es un modelo de la Zodiac de principios de los años 60 que recientemente ha sido objeto de reedición. Por si alguien tiene curiosidad sobre él, os dejo el enlace al hilo en el que lo presenté: https://relojes-especiales.com/threads/el-primer-misterioso-de-la-zodiac-el-olympos.443725/
Y también os muestro el resto de la representación relojera digna de tal nombre
El resto eran smartwatches
Y llegados a este punto, dejamos el resto de la la noche en manos de los profesionales, que hay que alimentar el ambiente de la ciudad
Bueno, querido vilobi, confío en despertarte… como mínimo el apetito
Gracias y saludos a todos los que habéis llegado hasta aquí