B
barista
Visitante
Buenas a todos
Lo que contaré es una crónica de un arrepentimiento.
Si mal no me equivoco fue en 2016.
La hija de una amiga cumplió 15, y desde que ella era niña conocía mi Breil Manta.
Yo, en modo chiste, le decía que a los 15 se lo regalaría...
Un error imperdonable.
Recuerdo que hice un hilo en otros foros antes de llevárselo.
En aquel hilo hablaba del pesar que me embargaba por haber hecho semejante promesa sin sentido.
Se me revolvía el estómago de solo pensar lo tan boba que fui en prometer ese reloj a una niña que nada sabe de cuidar tesoros.
Error gigante como Siberia.
El reloj había sido mi primer cuarzo y comprado en 1989.
Y encima un Breil Manta calibre 956.414 7 rubíes.
Un auténtico coleccionable.
Y el Breil se fue a la muñeca de la chica.
O al cajón de la basura.
Mi amiga ( su madre ),muy atenta, hace unos meses me preguntó si quería de vuelta el reloj.
La nena ( hoy a punto de cumplir 19 ) ya había perdido todo interés en el Breil y lo tenía en una caja con todo tipo de trastos para tirar a la basura en su anual limpieza de su cuarto.
Es decir, literalmente, mi amiga lo salvó al Breil de ir a la basura.
Por supuesto le agradecí la deferencia.
Le propuse asumir el costo del correo ( 10 mil kilómetros no son baratos para un reloj con Aduanas que no se llevan bien... ) pero ella dijo que no.
Y acá está otra vez, el pobre.
Llegó la semana pasada.
Una calamidad. El reloj está destruido.
El bisel se sale, el cristal está rayado hasta la saciedad, la tapa de atrás cierra en falso, algunos eslabones del reloj están torcidos y el estado general es pésimo ( yo no sé qué hizo esta chica con el reloj... ).
Solo los dioses saben lo que la adolescente hizo con él...
Es como que el Breil fue a alguna guerra o algo así.
Pero por lo menos anda.
Y está otra vez conmigo.
Ya he decidido dos cosas: nunca mas hacer promesas tontas ( la del Breil fue una promesa muy estúpida de mi parte... ); y una vez se termine la pila guardarlo y en lo posible restaurarlo.
Se lo merece.
Gracias por pasar por el hilo.
Que sigan bien.
Lo que contaré es una crónica de un arrepentimiento.
Si mal no me equivoco fue en 2016.
La hija de una amiga cumplió 15, y desde que ella era niña conocía mi Breil Manta.
Yo, en modo chiste, le decía que a los 15 se lo regalaría...
Un error imperdonable.
Recuerdo que hice un hilo en otros foros antes de llevárselo.
En aquel hilo hablaba del pesar que me embargaba por haber hecho semejante promesa sin sentido.
Se me revolvía el estómago de solo pensar lo tan boba que fui en prometer ese reloj a una niña que nada sabe de cuidar tesoros.
Error gigante como Siberia.
El reloj había sido mi primer cuarzo y comprado en 1989.
Y encima un Breil Manta calibre 956.414 7 rubíes.
Un auténtico coleccionable.
Y el Breil se fue a la muñeca de la chica.
O al cajón de la basura.
Mi amiga ( su madre ),muy atenta, hace unos meses me preguntó si quería de vuelta el reloj.
La nena ( hoy a punto de cumplir 19 ) ya había perdido todo interés en el Breil y lo tenía en una caja con todo tipo de trastos para tirar a la basura en su anual limpieza de su cuarto.
Es decir, literalmente, mi amiga lo salvó al Breil de ir a la basura.
Por supuesto le agradecí la deferencia.
Le propuse asumir el costo del correo ( 10 mil kilómetros no son baratos para un reloj con Aduanas que no se llevan bien... ) pero ella dijo que no.
Y acá está otra vez, el pobre.
Llegó la semana pasada.
Una calamidad. El reloj está destruido.
El bisel se sale, el cristal está rayado hasta la saciedad, la tapa de atrás cierra en falso, algunos eslabones del reloj están torcidos y el estado general es pésimo ( yo no sé qué hizo esta chica con el reloj... ).
Solo los dioses saben lo que la adolescente hizo con él...
Es como que el Breil fue a alguna guerra o algo así.
Pero por lo menos anda.
Y está otra vez conmigo.
Ya he decidido dos cosas: nunca mas hacer promesas tontas ( la del Breil fue una promesa muy estúpida de mi parte... ); y una vez se termine la pila guardarlo y en lo posible restaurarlo.
Se lo merece.
Gracias por pasar por el hilo.
Que sigan bien.