Goldoff
Administrador de RE
Tripulación
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Mucho se ha hablado de diseños "míticos" o "atemporales" referidos a los dos clásicos de Genta: el Royal Oak de Audemars Piguet o el Nautilus de Patek Philippe. Pero por alguna razón se ignoran otros no menos clásicos, como pueda ser el Laureato de Girard Perregaux o el que protagoniza este texto: el Riviera Baume & Mercier. Igual es porque no tienen padre reconocido... Por cierto ¿os habéis fijado que el nombre de cada una de las cuatro está formado por dos apellidos?
El diseño del Riviera data de 1973 y, aunque no ha gozado del éxito de los otros citados (el del Laureato recién recuperado) lo cierto es que siempre ha estado ahí. Ahora llega equipando el calibre de manufactura Baumatic, con 5 días de reserva de marcha, resistencia magnética hasta 1.500 Gauss y fases de luna, en una caja de 43mm de diámetro. El brazalete es integrado, de tres piezas, y dispone de cierre desplegable igualmente triple. La corona está sobredimensionada para facilitar agarre.
La esfera es azul o gris, con efecto Soleil y posteriormente lacada. No estoy nada seguro de que la segundera verde de la versión azul le quede bien. Sin embargo, las agujas caladas le dan un toque de elegancia dentro de la línea deportiva en la que se encuadraría el modelo. En cuanto al calendario por aguja a las seis, sobrepuesto a la indicación de fases de luna, sería suficiente para que -personalmente- lo eliminara de mi whishlist: hubiera quedado mejor una ventana a las seis, y se mantendría la simetría.
Los 5.050 euros que cuesta con correa de caucho o los 5.200 euros con brazalete de acero lo hace interesante para quien quiera disponer de todos los rasgos que ahora están de moda: acero, brazalete integrado y calibre de manufactura a un precio digamos que contenido (WHAT?), aunque en ese entorno hay una -muy- feroz competencia.
El diseño del Riviera data de 1973 y, aunque no ha gozado del éxito de los otros citados (el del Laureato recién recuperado) lo cierto es que siempre ha estado ahí. Ahora llega equipando el calibre de manufactura Baumatic, con 5 días de reserva de marcha, resistencia magnética hasta 1.500 Gauss y fases de luna, en una caja de 43mm de diámetro. El brazalete es integrado, de tres piezas, y dispone de cierre desplegable igualmente triple. La corona está sobredimensionada para facilitar agarre.
La esfera es azul o gris, con efecto Soleil y posteriormente lacada. No estoy nada seguro de que la segundera verde de la versión azul le quede bien. Sin embargo, las agujas caladas le dan un toque de elegancia dentro de la línea deportiva en la que se encuadraría el modelo. En cuanto al calendario por aguja a las seis, sobrepuesto a la indicación de fases de luna, sería suficiente para que -personalmente- lo eliminara de mi whishlist: hubiera quedado mejor una ventana a las seis, y se mantendría la simetría.
Los 5.050 euros que cuesta con correa de caucho o los 5.200 euros con brazalete de acero lo hace interesante para quien quiera disponer de todos los rasgos que ahora están de moda: acero, brazalete integrado y calibre de manufactura a un precio digamos que contenido (WHAT?), aunque en ese entorno hay una -muy- feroz competencia.
Y tengo simpatía por la marca; creo que tiene más calidad que la que su escaso predicamento por aquí lleva a pensar. 
