Buenas, creo que la pregunta de hoy vendra bastante bien a todos los que no tenemos mucha experiencia en el tema. La pregunta que me surge es hasta que punto es caro el diseño o fabricación de un movimiento propio, y cual es mas caro de estos dos.
En términos generales, siempre es más cara la fabricación puesto que en ésta han de repercutirse los costes de I+D.
También hablando de forma más o menos porcentual, también es la fabricación la que se lleva la parte del león, al menos en tiradas "normales", tanto "porque sí" -la fábrica, sus herramientas, sus salarios... siempre van a tener un coste bruto mayor que un dpto. de I+D, salvo que estemos hablando de sectores donde la I+D sea el producto principal, como por una pura realidad económica: cualquier empresario ajustará sus costes de I+D, como máximo, como una fracción de lo que espera obtener con la venta: sería ridículo gastar 10 para una expectativa de beneficios de 5.
Esto me ha venido a la mente tras ojear el nuevo Timex Marlin, ahora con movimiento chino, teniendo en cuenta que el orginal traia un movimiento propio de la casa. Y esto es algo que ha pasado con la gran mayoria de casas, me cuesta entender como practicamente todas las casas relojeras empezaron con relejeros que en sus ratos libres armaban piezas por su cuenta y hoy en dia es impensable para una empresa que no sea de lujo o monopolice un gran sector del mercado el tener un movimiento propio.
Que es lo caro de este proceso? Diseñar el movimiento, el proceso de montaje de las piezas o es simplemente una estrategia de mercado en la que se busca un producto generico sin ninguna identidad para llenarse los bolsillos al ofrecer un menor precio (ojo, que entiendo como funciona el mundo y no pretendo que sea una critica a nada politico)?
Lo "caro" es una palabra que aparece con frecuencia por este foro: los "intangibles" o, más en particular, un "intangible" en concreto, el riesgo. Diseñar algo, además de sus evidentes costes propios, implica tiempo (o sea, coste de oportunidad, o sea, dinero) y te puede salir bien... o mal (o sea, más tiempo, más dinero y, quizá, pérdida de imagen de empresa). Desde esta perspectiva, para correr ese riesgo, los beneficios potenciales han de ser proporcionales, y no se perciben así (¿Realmente vendería mucho más, sobre todo en el corto/medio plazo, pongamos, Steinhart, si decidiese a desarrollar sus calibres? y para ello, primero tendría que comprar equipo, local, salarios... y esperar varios años para, después de todo esto, ver si la apuesta sale bien o no.
También tiene su efecto el background de estos empresarios: en las escuelas de negocios llevan décadas vendiendo aquello de "centrarse en la capacidad diferenciadora", lo que nos hace únicos, etc. y muchas de estas marcas entienden su negocio no como horológico (¿quién se compra un reloj mecánico para tener a su disposición la mejor hora posible?) sino estético... y el calibre no se ve.
Fíjate que tú también, probablemente, haces lo mismo por la parte que te toca: el éxito de la ropa
pret-à-porter, por ejemplo, viene no sólo de su menor precio, debido a una cuestión de escala, sino también y principalmente, como gestión del riesgo: ¿y si no acabo de saber pedirle al sastre lo que quiero? ¿y si luego no me gusta?... de entrada tengo que esperar varias semanas y luego, ya veremos. Es mucho más fácil acudir a una gran superficie (o a una exclusiva boutique, que tampoco es tan difícil encontrar ropa que deje pequeña la factura de un buen sastre) y elegir, tocar, probarse... la ropa antes de pagarla y, una vez tomada la decisión, simplemente pagarla y llevársela, es decir, ir
"a tiro hecho". Con un calibre ocurre lo mismo.
No se, puede que sea un ignorante, pero no acabo de entender como diseñar un movimiento manual o automatico puede ser tan complejo (sin entrar en mas complicaciones que dar la hora) cuando es algo que se lleva haciendo decadas y decadas. Un saludo.
Es que la cosa no es esa, la cosa es
¿para qué? tampoco es muy caro el servicio de limpieza (al fin y al cabo, se trata de obreros de baja cualificación a salario mínimo) y la mayoría de las empresas lo tienen externalizado.
Hasta los años 70, la manufactura era habitual porque, a cambio del riesgo, aportaba un valor diferencial evidente: las compañías (las punteras, al menos) se peleaban en el mercado por los calibres: el más preciso, el más pequeño, el más delgado, ¡no hace falta darle cuerda!... Hoy, la mayor parte de ese valor ya no existe así que tanto la inversión como la gestión del riesgo, es normal que se haya ido hacia otros sitios.
Si me apuras, es lo contrario lo que resulta curioso: que haya quien vea en la manufactura un valor en sí mismo: es manufactura... ¿y qué? Con decir eso no dices si es más preciso, o más delgado, o más fiable y robusto que los de la competencia. Yo, que quieres que te diga, prefiero un ETA 2824-2 grado cronómetro a un Seiko 7S36, por muy genérico que sea el primero y muy manufactura que sea el segundo.
PS: ...y, como después de todo, existe esa gente que aprecia el valor de la manufactura, tenga o no sentido, aquí vemos que
hasta Steinhart, ya que la mencioné antes, intenta cubrir al menos la apariencia, si bien no la sustancia (es decir, invertir hasta donde haya expectativas de retorno adecuado, pero no más allá
pay lip service, que dicen los ingleses).