Hermes-Lauren

Luc Perramond deja Hermès para dirigir Ralph Lauren

Acaba de saltar la noticia: al igual que en el mundo del deporte, las grandes estrellas en la gestión del lujo son codiciadas por los mejores equipos. Hace dos días el propio Luc Perramond, todavía CEO de La Montre Hermès anunciaba en un breve comunicado que «he sido nombrado CEO de Ralph Lauren Watches and Jewelry , division de the Ralph Lauren group , con efecto a partir de febrero de 2015. Estoy emocionado por este nuevo reto, sobre todo porque trabajaré mano a mano con el propio Ralph Lauren, uno de los grandes diseñadores de nuestro tiempo.»

Luc-Perramond-a-Ralph-LaurenHay que recodar que Luc Perramond no es nuevo en la industria relojera… bien, en realidad es todo un veterano, ya que  desde 1988  se encargó  de reflotar la venerable Heuer poniendo a TAG-Heuer en lo más alto de la relojería mundial durante los diez años que estuvo al frente (el mercado americano pasó de  diez a cien millones de dólares en esos diez años). Más tarde, en un leverage buy-out junto con otros directivos, compró la marca, la sacó a bolsa y  vendió una parte al coloso LVMH  pasando además a ocupar la viceprsidencia para la división de joyería y relojería en dicho grupo… que abandona en el año 2000 para fundar y dirigir LP, consultora especializada en el sector del lujo. Espíritu inquieto, en el año 2002 deja la consultora para entrar a formar parte de la junta directiva y ser el presidente para Europa y Asia de la brasileña H. Stern Jewelers, puesto que ocupa durante siete años.

En 2009, con la crisis económica ya instalada en el panorama mundial, se incorpora a Hermès como responsable de la división relojera. Para entonces -en 2006- La Montre Hermès ya había comprado el 25% del capital de su proveedor de calibres Vaucher Manufacture Fleurier, la manufactura de Parmigiani, por 16 millones de euros. Aun así, y con cerca de 90 millones de euros,  el volumen de negocio de esta división -hay catorce- no representaba más que el 5%  del total del grupo. Desde la incorporación de Perramond, La Montre Hermès ha experimentado un enorme salto hacia arriba aportando complicaciones inéditas pero sobre todo poéticas, como el ArceauTemps Suspendu y l’Heure Masquée.

¿Quién le sucederá? No tengo ni idea, pero yo apostaría por alguien de la Casa, también fichaje en su día. Con experiencia, con la filosofía Hermès corriendo por sus venas y que entre otros domina un idioma que no es frecuente entre los CEOs del sector del lujo. Y que también usa gafas.