2nd-second
Forer@ Senior
Sin verificar
Mi obsesión por la Mandarín original se me está esfumando... ayer la tuve en mis manos, y es llamativa, pero no me dio un vuelco el corazón. Sé que he dado mucha tarea con la Mandarín pero no se me aceleró ayer el pulso.
Últimamente estoy muy delicado, pues parece que me he vuelto mucho más selectivo; a pesar de no tener una basta colección, pues sólo tengo 8 estilográficas y 1 de camino.
Estoy teniendo algún tipo de crisis parecida a la que podría tener alguien con muchos años de afición, y una gran cantidad de estilográficas, pero sin tener ni una ni la otra cosa.
La reciente y novedosa Parker Duofold amarilla, que yo mismo recomendé, la he visto esta mañana y no me ha terminado de enamorar: el amarillo con los cuadrados de distintos tonos no termina de armonizar correctamente para mi gusto; prefiero la Duofold verde.
Creo que mi obsesión mandarina se ha transformado más bien en fiebre amarilla, pues quizás lo que realmente quisiera es encontrar una estilográfica en la que predomine el citado color, y que me apasione, por supuesto.
Que nadie me entienda mal: tengo varias cosas a la vista que me tienen enamorado, es sólo que antes Cupido me visitaba más frecuentemente.
Está claro que cada uno tiene sus motivos de compra: los míos, partiendo de que escriba increíblemente bien, son estéticos, pues el saber que la pluma tiene 80 años no es un valor añadido para mí, como en un principio presuponía.
Ojo, no estoy criticando a nadie, nada más lejos de mi intención: simplemente comparto con vosotros mis "dudas grafómanas".
Cuando escribí el hilo sobre Waterman, por poner un ejemplo, implorando que renovasen sus líneas de diseño, expuse mis razones por las que salvo la Sérénité no me gustaban las demás series. Quisiera aclarar que además de pensar que la Sérénité es una de las mejores compras que he hecho, no quise “ofender” a nadie, pues mis criterios eran simplemente “estéticos”, los cuales son distintos para cada persona: repito que por muy bien que escriba una estilográfica si no me entra por el ojo, no la compro… al igual que una pluma preciosa que no escriba de acuerdo a mis exigencias, tampoco viene conmigo a casa.
Ayer, en el penshow de Málaga, escuché a alguien de despreciar a las plumas actuales por ser "trozos de plástico", y creo que no es argumento suficiente, es una simple generalización y una afirmación fácil.
No creo que todo lo que se hace hoy en día sea un simple trozo de plástico decorado con un convertidor estándar en su interior.
No comparto la estrategia comercial de elaborar una edición limitada y venderla por una suma importante y ni si quiera molestarse en al ser una edición especial y cara ponerle alimentación por émbolo. Al igual que tampoco entiendo lógicos los precios desorbitados de algunas vintages en determinadas “condiciones de conservación”:
SITUACION 1:
-Vendedor: son X euros.
-Comprador: ¿por qué cuesta tanto?
-Vendedor: porque han hecho una tirada de 4.973 estilográficas para todo el mundo, y los moldes son enviados en un container al interior de un volcán para destruirlos.
-Comprador: ¿no existe edición NO limitada?
-Vendedor: sí, pero no de este modelo. Le puedo enseñar otras series “regulares” (con desgana) que no “especiales” (con énfasis) como esta maravilla de la que ha tenido usted el buen gusto de fijarse.
-Comprador: disculpe, ¿sabe usted que volcán es?
-Vendedor: ¿perdón?
-Comprador: donde destruyen los moldes…
-Vendedor: no, ¿por qué le interesa?
-Comprador: para ver si puedo hablar con el que hizo el molde para sugerirle que la próxima vez se acuerde de no poner un convertidor de 6 euros en una pluma de X euros.
-Vendedor: imposible, señor, al artesano también lo arrojan a la lava para que no haga una edición regular de la misma pluma… Entre el desplazamiento al volcán, la pensión vitalicia a la viuda del artesano y el pago de la multa por contaminar el medio ambiente… todo eso vale lo suyo…
SITUACION 2:
-Vendedor: son X euros.
-Comprador: ¿por qué cuesta tanto?
-Vendedor: porque es una pluma de 1930.
-Comprador: hay plumas de esa época que cuestan mucho menos.
-Vendedor: sí, pero no de este modelo. Le puedo enseñar otras plumas antiguas de las que se produjeron más cantidades, pero no son como ésta, evidentemente.
-Comprador: disculpe, ¿qué es esto de aquí?
-Vendedor: ¿perdón?
-Comprador: aquí, ¿lo ve usted? Paralelo al clip en el mismo capuchón.
-Vendedor: es un inequívoco signo de la historia que ha vivido esta pluma.
-Comprador: ¿no será más bien que no la ha pulido usted ni si quiera un poquito, y no se ha molestado en intentar quitarle el arañazo?
-Vendedor: ahí está la gracia, en que a mis clientes les gusta repararlas a ellos mismos.
-Comprador: ¿pero con este precio tan elevado? ¿con lo sucia que la tiene usted?
-Vendedor: no entiende usted de estilográficas: es polvo genuino de 1930 lo que tiene adherido... y eso vale lo suyo…
Sin ánimo de que nadie se moleste...
Últimamente estoy muy delicado, pues parece que me he vuelto mucho más selectivo; a pesar de no tener una basta colección, pues sólo tengo 8 estilográficas y 1 de camino.
Estoy teniendo algún tipo de crisis parecida a la que podría tener alguien con muchos años de afición, y una gran cantidad de estilográficas, pero sin tener ni una ni la otra cosa.
La reciente y novedosa Parker Duofold amarilla, que yo mismo recomendé, la he visto esta mañana y no me ha terminado de enamorar: el amarillo con los cuadrados de distintos tonos no termina de armonizar correctamente para mi gusto; prefiero la Duofold verde.
Creo que mi obsesión mandarina se ha transformado más bien en fiebre amarilla, pues quizás lo que realmente quisiera es encontrar una estilográfica en la que predomine el citado color, y que me apasione, por supuesto.
Que nadie me entienda mal: tengo varias cosas a la vista que me tienen enamorado, es sólo que antes Cupido me visitaba más frecuentemente.
Está claro que cada uno tiene sus motivos de compra: los míos, partiendo de que escriba increíblemente bien, son estéticos, pues el saber que la pluma tiene 80 años no es un valor añadido para mí, como en un principio presuponía.
Ojo, no estoy criticando a nadie, nada más lejos de mi intención: simplemente comparto con vosotros mis "dudas grafómanas".
Cuando escribí el hilo sobre Waterman, por poner un ejemplo, implorando que renovasen sus líneas de diseño, expuse mis razones por las que salvo la Sérénité no me gustaban las demás series. Quisiera aclarar que además de pensar que la Sérénité es una de las mejores compras que he hecho, no quise “ofender” a nadie, pues mis criterios eran simplemente “estéticos”, los cuales son distintos para cada persona: repito que por muy bien que escriba una estilográfica si no me entra por el ojo, no la compro… al igual que una pluma preciosa que no escriba de acuerdo a mis exigencias, tampoco viene conmigo a casa.
Ayer, en el penshow de Málaga, escuché a alguien de despreciar a las plumas actuales por ser "trozos de plástico", y creo que no es argumento suficiente, es una simple generalización y una afirmación fácil.
No creo que todo lo que se hace hoy en día sea un simple trozo de plástico decorado con un convertidor estándar en su interior.
No comparto la estrategia comercial de elaborar una edición limitada y venderla por una suma importante y ni si quiera molestarse en al ser una edición especial y cara ponerle alimentación por émbolo. Al igual que tampoco entiendo lógicos los precios desorbitados de algunas vintages en determinadas “condiciones de conservación”:
SITUACION 1:
-Vendedor: son X euros.
-Comprador: ¿por qué cuesta tanto?
-Vendedor: porque han hecho una tirada de 4.973 estilográficas para todo el mundo, y los moldes son enviados en un container al interior de un volcán para destruirlos.
-Comprador: ¿no existe edición NO limitada?
-Vendedor: sí, pero no de este modelo. Le puedo enseñar otras series “regulares” (con desgana) que no “especiales” (con énfasis) como esta maravilla de la que ha tenido usted el buen gusto de fijarse.
-Comprador: disculpe, ¿sabe usted que volcán es?
-Vendedor: ¿perdón?
-Comprador: donde destruyen los moldes…
-Vendedor: no, ¿por qué le interesa?
-Comprador: para ver si puedo hablar con el que hizo el molde para sugerirle que la próxima vez se acuerde de no poner un convertidor de 6 euros en una pluma de X euros.
-Vendedor: imposible, señor, al artesano también lo arrojan a la lava para que no haga una edición regular de la misma pluma… Entre el desplazamiento al volcán, la pensión vitalicia a la viuda del artesano y el pago de la multa por contaminar el medio ambiente… todo eso vale lo suyo…
SITUACION 2:
-Vendedor: son X euros.
-Comprador: ¿por qué cuesta tanto?
-Vendedor: porque es una pluma de 1930.
-Comprador: hay plumas de esa época que cuestan mucho menos.
-Vendedor: sí, pero no de este modelo. Le puedo enseñar otras plumas antiguas de las que se produjeron más cantidades, pero no son como ésta, evidentemente.
-Comprador: disculpe, ¿qué es esto de aquí?
-Vendedor: ¿perdón?
-Comprador: aquí, ¿lo ve usted? Paralelo al clip en el mismo capuchón.
-Vendedor: es un inequívoco signo de la historia que ha vivido esta pluma.
-Comprador: ¿no será más bien que no la ha pulido usted ni si quiera un poquito, y no se ha molestado en intentar quitarle el arañazo?
-Vendedor: ahí está la gracia, en que a mis clientes les gusta repararlas a ellos mismos.
-Comprador: ¿pero con este precio tan elevado? ¿con lo sucia que la tiene usted?
-Vendedor: no entiende usted de estilográficas: es polvo genuino de 1930 lo que tiene adherido... y eso vale lo suyo…
Sin ánimo de que nadie se moleste...
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