Muy buenas fotos, el reloj sin comentarios
A veces al ojear estos reportajes fotográficos me invaden ciertos recuerdos divertidos, me suele pasar que cuando acudo a ciertos lugares de vacaciones con el reloj, en un momento dado estiro el brazo y comienzo a girar la muñeca hasta encontrar un ángulo adecuado mientras enfoco el reloj y comienzo a sacar fotos a medida que paseamos. Transcurrido un tiempo familiares y amigos me miran extrañados y me dicen; ¿Pero que coño haces poniendo la mano delante de la cámara? ¿Estás pirado?
Mi comprensiva esposa, acostumbrada a manejar este tipo de situaciones, resuelve de inmediato el incidente; - Si no dejas de hacer el ridículo delante la gente no vuelves a comprar otro reloj!!!

Bueno, actualmente ya están familiarizados y no les llama tanta la atención, pero percibo que me siguen mirando como un bicho raro.