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Esto es una traducción (libre) de una página de Chronomania escrita por Alain. Lamentablemente se ha perdido el rastro del original.
LA COMPULSION RELOJERA IMPULSIVA (CRI)
Y COMO (NO) CURARLA
Los primeros síntomas de la compulsión relojera impulsiva (CRI) son benignos. Uno compra su primer "reloj bueno" porque le gusta su estética, porque la marca tiene una buena reputación, porque esta fabricado en Suiza, porque Pierce Brosnan, Swartche o el Dalai Lama también lo tienen, porque "yo lo valgo"...en resumen: gastamos lo que creemos que es una gran cantidad de dinero en un objeto que creemos que vamos a conservar toda la vida. Craso error.
Al principio todo va bien. Miramos 400 veces al dia nuestro reloj sin ver la hora, andamos por la calle sacando pecho y esperamos con impaciencia el momento en que alguien nos diga: "Ah, qué bonito Omega,IWC, Breitling, Tag" (tacha lo que no proceda). Pero ese momento nunca llega.
Los dias pasan. Uno empieza a documentarse, a hojear libros, a navegar por la red, charlamos con relojeros... y contraemos el virus.
De repente el reloj mas chulo del mundo, el que era nuestro orgullo y ojito derecho, ya no nos parece tan chulo. Y empezamos a soñar con otros relojes: más de esto, menos de aquello, seguramente mucho mejor y por ello mucho mas caro. Entonces intentamos razonar y nos decimos que no necesitamos otro reloj, que de todos modos no dará la hora mejor que el otro (pero entonces, ¿por qué no te habías comprado un Swatch, amigo mio?), que tampoco está tan mal... ¡Pero acabamos comprándolo!
Estamos perdidos. Nos hemos convertido en coleccionista de relojes: Se ha declarado la CRI.
Empieza una vida errante y llena de dudas, atravesada por algunos momentos fugaces de placer. Porque el placer mas grande de un cazador de relojes es el de rastrear y acechar su presa, y su perdicion es la de comprar: una vez que el reloj está en su muñeca, la excitación decae al cabo de una semana ...¡Y las ansias cazadoras vuelven con mas fuerza!
¿Que hacer? ¡Nada! Pero eso no impide que os dé
Algunos consejos para convivir con la enfermedad:
Algunos consejos para intentar curarse:
Buena suerte
Alain, noviembre 2000
LA COMPULSION RELOJERA IMPULSIVA (CRI)
Y COMO (NO) CURARLA
Los primeros síntomas de la compulsión relojera impulsiva (CRI) son benignos. Uno compra su primer "reloj bueno" porque le gusta su estética, porque la marca tiene una buena reputación, porque esta fabricado en Suiza, porque Pierce Brosnan, Swartche o el Dalai Lama también lo tienen, porque "yo lo valgo"...en resumen: gastamos lo que creemos que es una gran cantidad de dinero en un objeto que creemos que vamos a conservar toda la vida. Craso error.
Al principio todo va bien. Miramos 400 veces al dia nuestro reloj sin ver la hora, andamos por la calle sacando pecho y esperamos con impaciencia el momento en que alguien nos diga: "Ah, qué bonito Omega,IWC, Breitling, Tag" (tacha lo que no proceda). Pero ese momento nunca llega.
Los dias pasan. Uno empieza a documentarse, a hojear libros, a navegar por la red, charlamos con relojeros... y contraemos el virus.
De repente el reloj mas chulo del mundo, el que era nuestro orgullo y ojito derecho, ya no nos parece tan chulo. Y empezamos a soñar con otros relojes: más de esto, menos de aquello, seguramente mucho mejor y por ello mucho mas caro. Entonces intentamos razonar y nos decimos que no necesitamos otro reloj, que de todos modos no dará la hora mejor que el otro (pero entonces, ¿por qué no te habías comprado un Swatch, amigo mio?), que tampoco está tan mal... ¡Pero acabamos comprándolo!
Estamos perdidos. Nos hemos convertido en coleccionista de relojes: Se ha declarado la CRI.
Empieza una vida errante y llena de dudas, atravesada por algunos momentos fugaces de placer. Porque el placer mas grande de un cazador de relojes es el de rastrear y acechar su presa, y su perdicion es la de comprar: una vez que el reloj está en su muñeca, la excitación decae al cabo de una semana ...¡Y las ansias cazadoras vuelven con mas fuerza!
¿Que hacer? ¡Nada! Pero eso no impide que os dé
Algunos consejos para convivir con la enfermedad:
- No comprar nunca una reloj nuevo pues, incluso los de alto precio, pierden el 35% de su valor nada mas salir por la puerta de la relojería. Y cuando trate de revenderse para financiar la próxima compra ese 35% se echará cruelmente de menos.
- Especializarse en una clase concreta o tipo de relojes, cuyos ejemplares a ser posible no sean muy caros: Los sub franceses de los 70's, los cronos suizos con máquina Landeron o las copias de Patek fabricadas en Corea del Norte
- Antes de comprar un reloj nuevo, cambiar la pulsera del viejo; a veces reaviva el afecto que se tenía al reloj.
- No comprar nunca un reloj en lugar de otro (por ejemplo: me gusta el IWC UTC, pero el precio es demasiado elevado para mí. Bueno, pues en vez de comprarme ese me compro el Fortis GMT, que es parecido.... Se acabará detestando el Fortis y comprando el IWC, con lo que se habrá realizado una compra superflua y contraproducente.
- No comprar dos veces el mismo reloj. Ejemplo: tenía un Certina, me gustaba, pero fui perdiendo el interés por él y lo vendí; luego lamenté haberlo vendido, olvidando las razones por las que lo había hecho, y volví a comprar un modelo igual, claro que más caro de lo que me costó la primera vez y mucho más de lo que me dieron por él; pero lo peor fue que volvieron a hacerse presentes las causas por las que lo había vendido y volví a venderlo; por supuesto, por menos de lo que me dieron la primera vez que lo vendí.
- Nunca hay que tratar de justificarse cuando apetece comprar un reloj. Es engañarse a uno mismo. Ejemplo: necesito ese reloj para ir a trabajar, el otro para la piscina, aquél para las reuniones de negocios y uno más para cuando salga de ligue. La realidad es que no sirve para nada acumular relojes ni, por supuesto, existe necesidad alguna de tenerlos para cualesquiera de los menesteres enunciados ni para ningún otro, salvo quizá el submarinismo... y tampoco. Ni siquiera para saber la hora que es: sobran artilugios donde poder mirarla.
- Comprarse un Lange&Söhne. No resolverá tus problemas, pero al menos tendrás un buen reloj.
Algunos consejos para intentar curarse:
- Empezar una psicoterapia de tal modo que tu terapeuta, a la vuelta de ocho años de tres sesiones diarias, cuente con los medios suficientes para comprarse un tourbillon con sonería a tu costa.
- Comprar un reloj que sea demasiado caro para tu economía. Cuando veas a tus hijos comer sopa de patatas todos los días y a tu esposa mendigando los domingos a la puerta de las iglesias te darás cuenta de la fatuidad de todo este asunto.
- Vender todos los relojes y pasarse a los sellos.
- Nunca confesar a los amigos o a los parientes el precio de la última adquisición; seguro que te toman por loco y sólo conseguirás sentirte un bicho raro.
- Elegir los seis relojes que más gusten de la colección que tenga cada uno, vender todos los demás y al final quedarse sólo con tres. O con uno (ja ja... No, en serio)
- Crear un sitio web que trate de relojes. Al menos podrás dedicarles tu tiempo sin tener que comprar
Buena suerte
Alain, noviembre 2000
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