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Mi mujer y yo somos médicos. Yo puedo hacer teletrabajo pero ella está al pie del cañón.
No tenemos familia cerca y la que tenemos, o es también del sector sanitario o es población de riesgo.
Tenemos dos niños pequeños en casa, no queda otra.
Cuando escuché los aplausos estaba jugando con mi hijo mayor, le dije que se acercara a escucharlo. Inmediatamente vino mi mujer tras dormir al pequeño, con lágrimas en los ojos, porque no se esperaba esa reacción. En mi barrio fue generalizado.
Nos llenó de energías y de ganas de luchar, pues sabiendo lo que nos esperaba, el desánimo y el miedo empezaban a hacer mella.
Pero siempre hay un pero...
...No pueden ponernos al pie del cañón sin medidas de protección básicas, no solo por nuestra salud, sino porque si nos contagiamos por falta de seguridad vamos a contagiar a muchísimos. Y el SARS-covid-2 es un factor añadido a la patología habitual: por esta situación no bajan los infartos de miocardio, los ictus, las neumonías por otras causas, los accidentes de tráfico (bueno, quizá eso sí con el estado de alarma), las complicaciones de los diabéticos, los EPOC, los aneurismas rotos, los diagnósticos y tratamientos de cáncer...
...en definitiva, que como caigamos nosotros (el sector sanitario), el coronavirus va a ser poca cosa en comparación con el resto.
La gente por lo general empieza a entender que esto es serio, y que no va de que no nos contagiemos, porque hay que asumir que nos contagiaremos todos, sino que no hay que hacerlo todos al mismo tiempo.
Se podrá estar más o menos de acuerdo con las medidas de este gobierno, pero es la estrategia que tenemos y hay que obedecer.
Tendríais que ver las sala de espera de urgencias casi vacías (que es como tendría que ser siempre) porque la gente se ha concienciado que hay que ayudar y dejar de ir por cosas banales al hospital.
Pero luego ves gente corriendo por la calle, grupos paseando al perro, gente en bicicleta, amenazas con que "te tosen" si no le dejas pasar en la fila del supermercado ... y la esperanza en la sociedad se debilita.
Haced caso, quedaos en casa, sed responsables y pensad ahora en sociedad, no en individuo, porque necesitamos ayuda, ya que no tenemos medios suficientes de protección.
Quiero y deseo que llegue el momento en que podamos salir nosotros y aplaudiros por comportamiento ejemplar.