Goldoff
Administrador de RE
Tripulación
Verificad@ con 2FA
Como dije en esta review del EFR S108, la marca Edifice está compuesta por una gran cantidad de modelos, desde los solo hora hasta complicaciones tipo calendario perpetuo. Eso sí, siempre basados en la electrónica y los distintos módulos que los equipan. Es importante conocer el número del módulo porque ayuda a identificar relojes distintos con las mismas funciones (5634, en el recuadro, antes del modelo).
El Edifice EFS S570 está alimentado por energía solar, por lo que se podría decir que -a menos que vivas en los Polos o cerca- no tendrás que preocuparte por el suministro de energía. La célula fotovoltaica está integrada bajo la esfera, de manera que sólo sabemos que es solar precisamente por la leyenda en esa esfera: "Solar Powered". Monta el módulo 5634 que, además de la hora y la fecha, ofrece un cronógrafo con tiempos intermedios -versión electrónica de un ratrappante- capaz de totalizar una hora, perfecto para controlar un parquímetro o la cocción de los spaghetti, pero no para ver crecer la hierba. Curiosamente, una vez transcurrida esa hora el crono se detendrá. La disposición de las subesferas es similar a la de un Valjoux 7750 salvo porque no tiene trotadora central: segundos y minutos del crono en 12 y 6, respectivamente, y segundos continuos a las 9. Como información adicional también permite ver el estado de carga de la batería: en el contador de minutos a las seis aparecen las indicaciones H, M y L (High, Medium, Low). La ventana de fecha, a las 4, muestra un disco del mismo color de la esfera con cifras blancas.
A destacar el trabajo de diseño que Casio ha hecho con la distribución de las subesferas en la esfera. Cada una tiene su propia medida o diámetro y, aunque sus centros están bastante cerca del del propio reloj se las apaña para dar sensación de amplitud, especialmente con el gran arco a la izquierda del de las nueve (segundos continuos) que llega a "comerse" parte de los índices a las 8, 9 y 10. Puestos a "comer", la subesfera de las seis (minutos del crono) también lo hace con parte de las 5, mucho de las 6 y algo menos de las 7, lo que en conjunto decanta el "peso" visual hacia a la izquierda, compensado por el logo a la derecha, donde no hay ninguna indicación analógica. Con todo, la legibilidad es óptima... con luz, porque el lumen dura muy poco en la oscuridad.
El conjunto caja-brazalete sigue la línea recientemente lanzada y popularmente conocida como CasiOak, esto es, brazalete integrado y caja con bisel octogonal. Como toda la colección, ambos son de acero, pero en este caso se añade el acabado "IP", que es un recubrimiento PVD (Phase Vapour Deposition). El recubrimiento puede ser en varias capas y tiene grosores de 0,8 a 1 micra y puede utilizarse como recubrimiento estético y/o protección ante el óxido, el sudor, el desgaste, los arañazos, el agua del mar, etc. El precio varía según el nivel de aplicación: 199 € la versión sólo de acero, 219 € la versión con sólo el bisel octogonal con ese tratamiento y 249 € la versión todo IP. Este acabado IP, de un color "gun metal" coincide casi perfectamente con el color de la esfera, realzando los toques blancos de índices y agujas. Agujas que, por cierto, recuerdan mucho a una daga.
Las dimensiones del Edifice EFS S570 son generosas: 44mm de diámetro y 49mm "lug to lug" (de asa a asa en vertical) pero quedan compensadas por un grosor de menos de 10mm que lo hacen cómodo de llevar en una muñeca de 17 cm de circunferencia como es mi caso. El brazalete es todo cepillado con algunas zonas pulidas a espejo, y el tratamiento IP/PVD -cuando lo lleva- está perfectamente aplicado. El doble pulsador del cierre hace prácticamente imposible que éste pueda abrirse accidentalmente.
Teniendo en cuenta el aspecto (mix “de vestir-deportivo”), el precio (entre 199 y 249 €) y que es resistente al agua hasta 100 metros, podría ser un reloj “de iniciación” para esas generaciones que sólo miran la hora en el móvil. ¿Regalo de Navidad?
El Edifice EFS S570 está alimentado por energía solar, por lo que se podría decir que -a menos que vivas en los Polos o cerca- no tendrás que preocuparte por el suministro de energía. La célula fotovoltaica está integrada bajo la esfera, de manera que sólo sabemos que es solar precisamente por la leyenda en esa esfera: "Solar Powered". Monta el módulo 5634 que, además de la hora y la fecha, ofrece un cronógrafo con tiempos intermedios -versión electrónica de un ratrappante- capaz de totalizar una hora, perfecto para controlar un parquímetro o la cocción de los spaghetti, pero no para ver crecer la hierba. Curiosamente, una vez transcurrida esa hora el crono se detendrá. La disposición de las subesferas es similar a la de un Valjoux 7750 salvo porque no tiene trotadora central: segundos y minutos del crono en 12 y 6, respectivamente, y segundos continuos a las 9. Como información adicional también permite ver el estado de carga de la batería: en el contador de minutos a las seis aparecen las indicaciones H, M y L (High, Medium, Low). La ventana de fecha, a las 4, muestra un disco del mismo color de la esfera con cifras blancas.
A destacar el trabajo de diseño que Casio ha hecho con la distribución de las subesferas en la esfera. Cada una tiene su propia medida o diámetro y, aunque sus centros están bastante cerca del del propio reloj se las apaña para dar sensación de amplitud, especialmente con el gran arco a la izquierda del de las nueve (segundos continuos) que llega a "comerse" parte de los índices a las 8, 9 y 10. Puestos a "comer", la subesfera de las seis (minutos del crono) también lo hace con parte de las 5, mucho de las 6 y algo menos de las 7, lo que en conjunto decanta el "peso" visual hacia a la izquierda, compensado por el logo a la derecha, donde no hay ninguna indicación analógica. Con todo, la legibilidad es óptima... con luz, porque el lumen dura muy poco en la oscuridad.
El conjunto caja-brazalete sigue la línea recientemente lanzada y popularmente conocida como CasiOak, esto es, brazalete integrado y caja con bisel octogonal. Como toda la colección, ambos son de acero, pero en este caso se añade el acabado "IP", que es un recubrimiento PVD (Phase Vapour Deposition). El recubrimiento puede ser en varias capas y tiene grosores de 0,8 a 1 micra y puede utilizarse como recubrimiento estético y/o protección ante el óxido, el sudor, el desgaste, los arañazos, el agua del mar, etc. El precio varía según el nivel de aplicación: 199 € la versión sólo de acero, 219 € la versión con sólo el bisel octogonal con ese tratamiento y 249 € la versión todo IP. Este acabado IP, de un color "gun metal" coincide casi perfectamente con el color de la esfera, realzando los toques blancos de índices y agujas. Agujas que, por cierto, recuerdan mucho a una daga.
Las dimensiones del Edifice EFS S570 son generosas: 44mm de diámetro y 49mm "lug to lug" (de asa a asa en vertical) pero quedan compensadas por un grosor de menos de 10mm que lo hacen cómodo de llevar en una muñeca de 17 cm de circunferencia como es mi caso. El brazalete es todo cepillado con algunas zonas pulidas a espejo, y el tratamiento IP/PVD -cuando lo lleva- está perfectamente aplicado. El doble pulsador del cierre hace prácticamente imposible que éste pueda abrirse accidentalmente.
Teniendo en cuenta el aspecto (mix “de vestir-deportivo”), el precio (entre 199 y 249 €) y que es resistente al agua hasta 100 metros, podría ser un reloj “de iniciación” para esas generaciones que sólo miran la hora en el móvil. ¿Regalo de Navidad?