
Narses84
Milpostista
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Vaya por delante que esto no es más que una torpe reseñilla, que no pretende aportar algo novedoso para quienes ya están familiarizados con esta fascinante afición, sino más bien ofrecer un resumen que compila lo que en otros lugares se ha explicado de manera más extensa y detallada. Probablemente existan artículos similares con mayor profundidad. Y lamento si hay errores; aplíqueme el principio de Hanlon: “no adjudique a la maldad lo que puede ser explicado con la ignorancia”.
Al lío, el reloj es una obra de arte que se compone de dos elementos inseparables: el calibre (la maquinaria que le da vida) y el diseño exterior (la estética que lo define y protege). Ambos conforman un todo indivisible que da sentido al reloj. Este artículo se centra en el segundo aspecto, el diseño, haciendo un breve recorrido por algunos de los mejores diseñadores de la historia de la relojería. Me dejo muchísimos y pongo solo cuatro , los cuatro que a mí más me gustan.
Gerald Genta, ¿the GOAT?.
Nacido en Ginebra en 1931, se formó como joyero y diseñador industrial antes de dedicarse al diseño de relojes. Comenzó trabajando para varias marcas suizas antes de establecer su propio estudio de diseño.
Entre sus principales creaciones:
• Omega Constellation: Aunque su participación fue más limitada, Genta influyó notablemente en el diseño de la primera generación.
• Audemars Piguet Royal Oak (1972): Según cuentan, diseñado en una sola noche basándose en un casco de buceo, de ahí su forma octogonal y la tornillería vista.
• Patek Philippe Nautilus (1976): Inspirado en las portillas de los barcos. Caja monobloque, brazalete integrado y su diseño funcional y minimalista.
Podríamos seguir con el IWC Ingenieur SL, Bulgari, Universal Genève Polerouter… un no acabar.
Genta fue un pionero en la integración del brazalete con la caja, su capacidad para unir funcionalidad y estética, y el uso de un lenguaje más industrial (tornillería vista) en la relojería de lujo. Genta es muy posiblemente el diseñador de relojes más influyente del último siglo.
Louis Cartier: El joyero
Ya sabemos que fue pionero en transformar relojes de bolsillo en relojes de muñeca. El Cartier Santos fue una petición personal del aviador Alberto Santos-Dumont.
En 1904, durante sus vuelos en dirigibles, Santos-Dumont se enfrentó a un desafío práctico. Los relojes de bolsillo, comunes en aquella época, no eran adecuados para sus necesidades, ya que resultaban incómodos y poco seguros mientras controlaba la aeronave. Para poder calcular con precisión el tiempo y la velocidad, requería un reloj que pudiera consultar fácilmente sin tener que soltar los mandos. Su diseño de caja cuadrada rompía la tendencia de relojes de bolsillo redondos. Añádele una esfera con gran legibilidad y dial limpio con una correa de cuero fácilmente ajustable, y tenemos un icono de la relojería listo.
No menos importante es el Cartier Tank , inspirado en los tanques Renault de la IGM (Renault FT-17) y el Mark V británico.
Quizás Cartier sea el ejemplo más claro del buen hacer a la hora de fusionar joyería y relojería. ¿Qué no? Fíjense en el inconfundible sello de la marca, el cabujón de la corona, donde Cartier incorpora un zafiro azul o espinela sintética, representación clásica de Cartier como joyero-relojero.
René-Alfred Chauvot. El reverso.
Hay poca información disponible del diseñador francés , lo que sí sabemos es que en 4 de marzo de 1931 patentó su invento en el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial de París, describiendolo como un “reloj de pulsera que puede deslizarse sobre su base y voltearse sobre sí mismo”. No es otro que el Jaeger Lecoultre reverso, para mí el reloj de vestir más elegante que el dinero puede pagar . El diseño obedecía a la necesidad de proteger el reloj por parte de los jugadores de polo. El reverso se convirtió en un fértil campo para la imaginación del joyero, grabados de todo tipo e incluso el famoso doble reloj.
Emblema relojero del Art Deco, movimiento que combinó el lujo y la modernidad en la primera mitad del siglo XX.
Taro Tanaka: El hombre que puso Japón a la altura de Suiza.
Graduado del Departamento de Diseño Industrial de la Universidad de Chiba en 1959, se unió a Seiko como el primer diseñador con formación universitaria en la empresa y revolucionó por completo el diseño de la marca nipona.
En 1962 Tanaka desarrolló su famosa gramática del diseño:
El primer reloj en cumplir esta premisa fue el mítico Grand Seiko 44GS (1967) , que permitió que Seiko compitiera con las marcas suizas más prestigiosas.
¿Te gusta Grand Seiko? Pues su lenguaje visual sigue siendo, sin mucha variación, el mismo que imprimió Tanaka en los años 60.
Si has llegado hasta aquí tienes mucho mérito. Muchas gracias por pasarte.
Al lío, el reloj es una obra de arte que se compone de dos elementos inseparables: el calibre (la maquinaria que le da vida) y el diseño exterior (la estética que lo define y protege). Ambos conforman un todo indivisible que da sentido al reloj. Este artículo se centra en el segundo aspecto, el diseño, haciendo un breve recorrido por algunos de los mejores diseñadores de la historia de la relojería. Me dejo muchísimos y pongo solo cuatro , los cuatro que a mí más me gustan.
Gerald Genta, ¿the GOAT?.
Nacido en Ginebra en 1931, se formó como joyero y diseñador industrial antes de dedicarse al diseño de relojes. Comenzó trabajando para varias marcas suizas antes de establecer su propio estudio de diseño.
Entre sus principales creaciones:
• Omega Constellation: Aunque su participación fue más limitada, Genta influyó notablemente en el diseño de la primera generación.
• Audemars Piguet Royal Oak (1972): Según cuentan, diseñado en una sola noche basándose en un casco de buceo, de ahí su forma octogonal y la tornillería vista.
• Patek Philippe Nautilus (1976): Inspirado en las portillas de los barcos. Caja monobloque, brazalete integrado y su diseño funcional y minimalista.
Podríamos seguir con el IWC Ingenieur SL, Bulgari, Universal Genève Polerouter… un no acabar.
Genta fue un pionero en la integración del brazalete con la caja, su capacidad para unir funcionalidad y estética, y el uso de un lenguaje más industrial (tornillería vista) en la relojería de lujo. Genta es muy posiblemente el diseñador de relojes más influyente del último siglo.
Louis Cartier: El joyero
Ya sabemos que fue pionero en transformar relojes de bolsillo en relojes de muñeca. El Cartier Santos fue una petición personal del aviador Alberto Santos-Dumont.
En 1904, durante sus vuelos en dirigibles, Santos-Dumont se enfrentó a un desafío práctico. Los relojes de bolsillo, comunes en aquella época, no eran adecuados para sus necesidades, ya que resultaban incómodos y poco seguros mientras controlaba la aeronave. Para poder calcular con precisión el tiempo y la velocidad, requería un reloj que pudiera consultar fácilmente sin tener que soltar los mandos. Su diseño de caja cuadrada rompía la tendencia de relojes de bolsillo redondos. Añádele una esfera con gran legibilidad y dial limpio con una correa de cuero fácilmente ajustable, y tenemos un icono de la relojería listo.
No menos importante es el Cartier Tank , inspirado en los tanques Renault de la IGM (Renault FT-17) y el Mark V británico.
- Renault FT-17:
Quizás Cartier sea el ejemplo más claro del buen hacer a la hora de fusionar joyería y relojería. ¿Qué no? Fíjense en el inconfundible sello de la marca, el cabujón de la corona, donde Cartier incorpora un zafiro azul o espinela sintética, representación clásica de Cartier como joyero-relojero.
René-Alfred Chauvot. El reverso.
Hay poca información disponible del diseñador francés , lo que sí sabemos es que en 4 de marzo de 1931 patentó su invento en el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial de París, describiendolo como un “reloj de pulsera que puede deslizarse sobre su base y voltearse sobre sí mismo”. No es otro que el Jaeger Lecoultre reverso, para mí el reloj de vestir más elegante que el dinero puede pagar . El diseño obedecía a la necesidad de proteger el reloj por parte de los jugadores de polo. El reverso se convirtió en un fértil campo para la imaginación del joyero, grabados de todo tipo e incluso el famoso doble reloj.
Emblema relojero del Art Deco, movimiento que combinó el lujo y la modernidad en la primera mitad del siglo XX.
Taro Tanaka: El hombre que puso Japón a la altura de Suiza.
Graduado del Departamento de Diseño Industrial de la Universidad de Chiba en 1959, se unió a Seiko como el primer diseñador con formación universitaria en la empresa y revolucionó por completo el diseño de la marca nipona.
En 1962 Tanaka desarrolló su famosa gramática del diseño:
- Superficies planas y pulidas.
- Diseños geométricos y reflectantes.
- Acabados en espejo logrados con el pulido Zaratsu.
El primer reloj en cumplir esta premisa fue el mítico Grand Seiko 44GS (1967) , que permitió que Seiko compitiera con las marcas suizas más prestigiosas.
¿Te gusta Grand Seiko? Pues su lenguaje visual sigue siendo, sin mucha variación, el mismo que imprimió Tanaka en los años 60.
Si has llegado hasta aquí tienes mucho mérito. Muchas gracias por pasarte.