verdigris
Habitual
Sin verificar
Hola compañeros,
Viendo la cantidad de reediciones de modelos clásicos que los fabricantes sacan periódicamente, muchas veces en ediciones limitadas, se me ha planteado una duda casi-existencial.
Y es que, así como en mobiliario, objetos decorativos y otros tipos de antigüedades NUNCA adquiriría una reproducción, imitación, adaptación o copia de un mueble antiguo, pues entiendo que en parte su mérito es su antigüedad y la coherencia formal o estilística con la época en que fue creado, y que la producción actual no puede (y tal vez no debe) trasmitir esos valores, respecto a las plumas no lo tengo claro.
Entiendo que aquellos modelos históricos (pelikan souverän, montblanc meisterstück…) que han continuado su producción ininterrumpidamente no son copias ni reediciones. Así mismo, aquellos modelos que vuelven a producirse al cabo de tiempo en los mismos talleres y con los mismos medios los considero nuevas ediciones del mismo modelo original.
Pero, cuando aparecen nuevas versiones de modelos míticos (parker duofold, parker 51…) ya no los veo de la misma manera: si bien quieren ofrecer la imagen del modelo original, los materiales, funcionamiento e incluso la línea han sido modificados. ¿Son falsificaciones o copias hechos por la propia marca?¿Es un síntoma de agotamiento de ideas?¿O bien un intento de la nueva propiedad de adquirir también la antigua gloria de la casa?¿O incluso simple oportunismo comercial?
Por otro lado, las plumas antiguas me atraen, tengo varias, pero cada vez menos las considero elementos para usar en el día a día, tienen sus manías y caprichos, fugas de tinta, pueden peligrar si salen de casa…
¿Debemos pedir a una pluma fabricada hoy día que responda a la estética y los procesos de fabricación actuales, tal como buscamos por ejemplo al comprar un coche o un televisor?
El detonante del dilema ha sido el lanzamiento de la nueva Pelikan 101N. ¿Es una reedición o una nueva versión del modelo original? Por ejemplo, el material ya no es el mismo: acetato en vez de celuloide y ebonita.
Viendo la cantidad de reediciones de modelos clásicos que los fabricantes sacan periódicamente, muchas veces en ediciones limitadas, se me ha planteado una duda casi-existencial.
Y es que, así como en mobiliario, objetos decorativos y otros tipos de antigüedades NUNCA adquiriría una reproducción, imitación, adaptación o copia de un mueble antiguo, pues entiendo que en parte su mérito es su antigüedad y la coherencia formal o estilística con la época en que fue creado, y que la producción actual no puede (y tal vez no debe) trasmitir esos valores, respecto a las plumas no lo tengo claro.
Entiendo que aquellos modelos históricos (pelikan souverän, montblanc meisterstück…) que han continuado su producción ininterrumpidamente no son copias ni reediciones. Así mismo, aquellos modelos que vuelven a producirse al cabo de tiempo en los mismos talleres y con los mismos medios los considero nuevas ediciones del mismo modelo original.
Pero, cuando aparecen nuevas versiones de modelos míticos (parker duofold, parker 51…) ya no los veo de la misma manera: si bien quieren ofrecer la imagen del modelo original, los materiales, funcionamiento e incluso la línea han sido modificados. ¿Son falsificaciones o copias hechos por la propia marca?¿Es un síntoma de agotamiento de ideas?¿O bien un intento de la nueva propiedad de adquirir también la antigua gloria de la casa?¿O incluso simple oportunismo comercial?
Por otro lado, las plumas antiguas me atraen, tengo varias, pero cada vez menos las considero elementos para usar en el día a día, tienen sus manías y caprichos, fugas de tinta, pueden peligrar si salen de casa…
¿Debemos pedir a una pluma fabricada hoy día que responda a la estética y los procesos de fabricación actuales, tal como buscamos por ejemplo al comprar un coche o un televisor?
El detonante del dilema ha sido el lanzamiento de la nueva Pelikan 101N. ¿Es una reedición o una nueva versión del modelo original? Por ejemplo, el material ya no es el mismo: acetato en vez de celuloide y ebonita.