El ciclo en un reloj mecánico está automatizado para programar el salto/cambio de fecha cada 20 horas desde el cambio de fecha anterior, dependiendo del reloj, y por ello se recomienda en muchas instrucciones de relojes con calendario no realizar el cambio horario entre esta hora; las 20;00 y las 3:00. Este cambio por ello viene automatizado para producirse en este intervalo horario de la tarde/noche. Y esto es lo que el usuario debe controlar únicamente, que las agujas horarias estén en la correcta posición “diurna” o “nocturna”.
En los relojes de cambio rápido de fecha se puede corregir esta a través de la “segunda” posición en extracción de la corona, tal como no lo hacían los modelos anteriores mecánicos más antiguos.
En relojes sin cambio rápido de fecha, el modo normal de corrección era “acelerar” las horas manualmente hasta hacer cambiar la fecha moviendo las agujas en sentido horario para ello. Hay otros modelos más actuales, en los que se “libera” únicamente la aguja de horas, que no arrastra la de minutos, para adelantar y corregir la fecha.
Creo que muchas veces algunas personas no son conscientes de cambiar la fecha de forma correcta asegurando que el cambio de hora automatizado queda a disposición de activarse en la noche. Por ello de coger un reloj mecánico que se ha parado en la noche (supongamos que a las 21 horas más o menos) y lo cogemos por la mañana (a las 9;00 por ejemplo) de no avanzar las agujas las 12 horas que ha estado “dormido” podremos comprobar que el cambio de hora no se hace a la correcta y que la fecha nos cambiará a las 12:00 del mediodía).
Hay algunos modelos que tienen una sub-esfera en el dial que muestran las 24 horas para que seamos conscientes de si estamos viendo las horas diurnas o nocturnas.
Sirva de ejemplo este bonito Eterna Soleure Chrono monopulsante Moon donde se muestra esta útil sub-esfera de ayuda a las 21. Obviamente en países mediterráneos no le vemos utilidad pero si que sirve para muchos países árticos donde hay incluso meses continuos de noches y días (6 para ser más concretos). En Groenlandia, Islandia e incluso zonas de Canadá entre otros esta función en la esfera para registrar las horas “vitales” respecto del calendario terrestre, sirve de gran ayuda para estar en “sintonía” con el resto del planeta.
En otros relojes incluso las 24 horas se hacen visibles en la esfera principal, sirva de ejemplo el Breitling Navitimer Cosmonaute, que refleja en la esfera las 24 horas del día, quedando registradas a la altura de las 18;00 de la tarde las 12;00 del mediodía de un reloj convencional. En el Cosmonaute fue la funcionalidad la que implicó el diseño pues eran relojes mecánicos manuales para astronautas y claro, en el espacio no hay forma de distinguir la noche del día a menos que llevemos bien puesto en hora nuestro reloj
