2nd-second
Forer@ Senior
Sin verificar
¿CÓMO COMPRAR UN CAPRICHO SIN QUE LA FAMILIA SE ENFADE?
Yo reconozco que a mí el dinero, el poquito que tengo con mi sueldo, me quema literalmente: entre estilográficas, fotografía y relojes no me llega.
Mi primer intento de solucionar el problema fue bastante drástico: pensar que era más importante, si mi santa compañera o mis caprichos y, como todos habréis podido imaginar, me decanté por mis caprichos… ya no estamos juntos mi aún “santa” y yo.
El grave error cometido por mi loca cabecita ha sido tener una envidiable relación con ella (sigue siendo la persona más importante en mi vida, mi mejor amiga, y me sigue poniendo “malo” cuando mueve el “cacerolo” al andar), de manera que sigue reprochándome mis gastos en caprichos.
Como contramedida a mi asumido error, pensé que una buena estratagema podría ser no enseñarle mis caprichitos, pero era una situación insostenible: terminas olvidando lo que le has enseñado y lo que no, escondiendo las cosillas cuando viene a casa, confundiéndote a ti mismo con una situación bastante difícil de mantener debido al gran número de pequeñas mentiras sin importancia (me tocó en la tómbola, es un premio que me han dado por trabajar duro en la oficina, me lo encontré en el suelo con la caja y el manual y todo, comprando 3 paquetes de cereales, es un nuevo coleccionable de la edición dominical del periódico, y, la más arriesgada, nena, me lo regalaste tú, no lo recuerdas???).
Un mal día, todo hay que decirlo, decides que cada uno tiene que estar en su sitio, sin más mentiras, con la cabeza bien alta: “sí, es nuevo, y me ha costado X euros”… seré imbécil, arrepentido durante 1 semana, la misma que ella utiliza para martirizarme con broncas (estás loco, como se te ocurre, otro???) o, peor aún, con consejos (debes reunir, voy a apuntarte a un plan de pensiones, “este pan para este queso”).
Pensaréis que no hay remedio para nuestra situación, verdad?
HAY SOLUCION: ENCONTRARLE/POTENCIARLE UN PEQUEÑO CAPRICHO.
Mi solución ha pasado por potenciar su debilidad a los zapatos, así como descubrirle un nuevo mundo: los bolsos. Me encanta ir con ella de compras ya que suelo tener muy buen ojo: siempre elijo lo más caro. Aprovecho cualquier ocasión para llevarla a boutiques. La animo para que gaste: anda, nena, no seas tonta, cómpralo que tú te lo mereces…
La otra parte de la solución pasa por tener buena memoria o, en mi caso, hacer uso de un libro para escribir y una de mis estilográficas…
Cada vez que me compro algún nuevo capricho, tengo los suficientes “pendientes reales” de ir a su casa y enseñárselo… y sigo vivo!!!
Cómo es posible?
Me he comprado tapones para las orejeas?
NO, COMPAÑEROS, LA SOLUCION ES “TIRAR DE HISTORICO”:
En cuanto abre la boca, sea para decir lo que sea, empiezo a narrar:
Fecha: sábado 16 de febrero de 2008
Hora: 18:13 h. (GMT +1)
Localidad: Puerto Banús, Marbella
Tienda: Farrutx
Compra: zapatos de charol negro con punta blanca, tacón fino y alto, y adorno en el lateral exterior a la altura del juanete
Importe: 225 euros
Stock específico: 93 pares
Muy importante las características del objeto, para que no intente engañarnos, y sobre todo intentar tener actualizado mediante regulares inventarios el número de ítems que tiene la señora de zapatos, bolsos, etc.
Es muy importante repetir continuamente la frase “teniendo ya X zapatos, que digo yo que descalza no vas” (por poner el ejemplo del calzado).
En cuestión de recordarle 2 o 3 compras, se calla, recapacita (las mujeres lo hacen, los hombres no, esa es nuestra principal diferencia) y me dice: me dejas ver el reloj? Es precioso… de hecho ahora es ella la que de vez en cuando me recuerda la buena compra que he hecho con mi último reloj, y que es el que más le gusta.
Un último consejo para los amantes de las estilográficas: NUNCA “tiréis de histórico” mediante el método tradicional (memoria), aprovechad para compraros una buena agenda de piel y una nueva estilográfica, con la frase “es que lo necesito para llevar registro de todas esas cositas innecesarias que caprichosamente compras” podéis estar tranquilos.
Nota: a los que no les gusten las estilográficas, además de decirles “muy mal”, aconsejarles la adquisición de una flamante PDA, utilizando la misma frase.
Yo reconozco que a mí el dinero, el poquito que tengo con mi sueldo, me quema literalmente: entre estilográficas, fotografía y relojes no me llega.
Mi primer intento de solucionar el problema fue bastante drástico: pensar que era más importante, si mi santa compañera o mis caprichos y, como todos habréis podido imaginar, me decanté por mis caprichos… ya no estamos juntos mi aún “santa” y yo.
El grave error cometido por mi loca cabecita ha sido tener una envidiable relación con ella (sigue siendo la persona más importante en mi vida, mi mejor amiga, y me sigue poniendo “malo” cuando mueve el “cacerolo” al andar), de manera que sigue reprochándome mis gastos en caprichos.
Como contramedida a mi asumido error, pensé que una buena estratagema podría ser no enseñarle mis caprichitos, pero era una situación insostenible: terminas olvidando lo que le has enseñado y lo que no, escondiendo las cosillas cuando viene a casa, confundiéndote a ti mismo con una situación bastante difícil de mantener debido al gran número de pequeñas mentiras sin importancia (me tocó en la tómbola, es un premio que me han dado por trabajar duro en la oficina, me lo encontré en el suelo con la caja y el manual y todo, comprando 3 paquetes de cereales, es un nuevo coleccionable de la edición dominical del periódico, y, la más arriesgada, nena, me lo regalaste tú, no lo recuerdas???).
Un mal día, todo hay que decirlo, decides que cada uno tiene que estar en su sitio, sin más mentiras, con la cabeza bien alta: “sí, es nuevo, y me ha costado X euros”… seré imbécil, arrepentido durante 1 semana, la misma que ella utiliza para martirizarme con broncas (estás loco, como se te ocurre, otro???) o, peor aún, con consejos (debes reunir, voy a apuntarte a un plan de pensiones, “este pan para este queso”).
Pensaréis que no hay remedio para nuestra situación, verdad?
HAY SOLUCION: ENCONTRARLE/POTENCIARLE UN PEQUEÑO CAPRICHO.
Mi solución ha pasado por potenciar su debilidad a los zapatos, así como descubrirle un nuevo mundo: los bolsos. Me encanta ir con ella de compras ya que suelo tener muy buen ojo: siempre elijo lo más caro. Aprovecho cualquier ocasión para llevarla a boutiques. La animo para que gaste: anda, nena, no seas tonta, cómpralo que tú te lo mereces…
La otra parte de la solución pasa por tener buena memoria o, en mi caso, hacer uso de un libro para escribir y una de mis estilográficas…
Cada vez que me compro algún nuevo capricho, tengo los suficientes “pendientes reales” de ir a su casa y enseñárselo… y sigo vivo!!!
Cómo es posible?
Me he comprado tapones para las orejeas?
NO, COMPAÑEROS, LA SOLUCION ES “TIRAR DE HISTORICO”:
En cuanto abre la boca, sea para decir lo que sea, empiezo a narrar:
Fecha: sábado 16 de febrero de 2008
Hora: 18:13 h. (GMT +1)
Localidad: Puerto Banús, Marbella
Tienda: Farrutx
Compra: zapatos de charol negro con punta blanca, tacón fino y alto, y adorno en el lateral exterior a la altura del juanete
Importe: 225 euros
Stock específico: 93 pares
Muy importante las características del objeto, para que no intente engañarnos, y sobre todo intentar tener actualizado mediante regulares inventarios el número de ítems que tiene la señora de zapatos, bolsos, etc.
Es muy importante repetir continuamente la frase “teniendo ya X zapatos, que digo yo que descalza no vas” (por poner el ejemplo del calzado).
En cuestión de recordarle 2 o 3 compras, se calla, recapacita (las mujeres lo hacen, los hombres no, esa es nuestra principal diferencia) y me dice: me dejas ver el reloj? Es precioso… de hecho ahora es ella la que de vez en cuando me recuerda la buena compra que he hecho con mi último reloj, y que es el que más le gusta.
Un último consejo para los amantes de las estilográficas: NUNCA “tiréis de histórico” mediante el método tradicional (memoria), aprovechad para compraros una buena agenda de piel y una nueva estilográfica, con la frase “es que lo necesito para llevar registro de todas esas cositas innecesarias que caprichosamente compras” podéis estar tranquilos.
Nota: a los que no les gusten las estilográficas, además de decirles “muy mal”, aconsejarles la adquisición de una flamante PDA, utilizando la misma frase.