Goldoff
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Para quien no lo conozca, Alain Silberstein fue en su día (y hasta hoy, creo) el primer arquitecto relojero, por este orden. Sus creaciones no pasaban inadvertidas: el aspecto de sus relojes combinado con los precios a los que se vendían los hacía tema de conversación en cualquier corrillo de aficionados: eran diseños que se amaban u odiaban con la misma intensidad. Nacida en 1990, la empresa que llevaba su nombre declinó a finales de esa misma década.
Por su parte, Louis Erard ha venido siendo la otra cara de la moneda: relojes clásicos con tímidos toques "deportivos" a precios comedidos (para lo que es la relojería suiza). Desde su relanzamiento en 2003, el regulador, una disposición que separa los centros de las agujas minutera y horaria para mejorar la lectura y la precisión, es el pilar de sus colecciones.
Pues resulta que estos dos elementos tan a priori dispares se embarcan en una aventura común que será una primera vez para ambas partes: en sus 90 años de existencia Louis Erard nunca había dado carta blanca a un diseñador, mientras que Alain Silberstein nunca antes había diseñado un regulador.
Y este es el resultado: dos ediciones limitadas a 178 ejemplares cada una
El calibre es un Peseux (ahora eta) 7001 de carga manual con el módulo RE9 exclusivo de Louis Erard. Vibra a 21.600 a/h (3 Hz) y tiene una reserva de marcha de 42 horas. Acabado Top con Côtes de Généve y grabado Louis Erard
Caja de acero pulido o con tratamiento PVD negro según versión, cristal de zafiro con tratamiento anti-reflejo por las dos caras. Fondo visto cerrado con tornillos cuyo cristal está decorado.
Esfera negra/blanca o opalina (plateada mate) según versión.
Correa de piel de vacuno, negra o marrón según versión con las correspondientes hebillas en acero o PVD negro.
El precio será de 2.800 francos suizos. Cien más para la versión en negro.
Por su parte, Louis Erard ha venido siendo la otra cara de la moneda: relojes clásicos con tímidos toques "deportivos" a precios comedidos (para lo que es la relojería suiza). Desde su relanzamiento en 2003, el regulador, una disposición que separa los centros de las agujas minutera y horaria para mejorar la lectura y la precisión, es el pilar de sus colecciones.
Pues resulta que estos dos elementos tan a priori dispares se embarcan en una aventura común que será una primera vez para ambas partes: en sus 90 años de existencia Louis Erard nunca había dado carta blanca a un diseñador, mientras que Alain Silberstein nunca antes había diseñado un regulador.
Y este es el resultado: dos ediciones limitadas a 178 ejemplares cada una
El calibre es un Peseux (ahora eta) 7001 de carga manual con el módulo RE9 exclusivo de Louis Erard. Vibra a 21.600 a/h (3 Hz) y tiene una reserva de marcha de 42 horas. Acabado Top con Côtes de Généve y grabado Louis Erard
Caja de acero pulido o con tratamiento PVD negro según versión, cristal de zafiro con tratamiento anti-reflejo por las dos caras. Fondo visto cerrado con tornillos cuyo cristal está decorado.
Esfera negra/blanca o opalina (plateada mate) según versión.
Correa de piel de vacuno, negra o marrón según versión con las correspondientes hebillas en acero o PVD negro.
El precio será de 2.800 francos suizos. Cien más para la versión en negro.
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