P
PEPELIZA
Milpostista
Sin verificar
Juan trabajaba en una fabrica de envasado de pepinos desde hacía muchos años. Un día llegó a casa y le dijo a su mujer que tenía un deseo incontrolable: Meter su pene dentro de la cortadora de pepinos.
Su mujer le recomendó ir a un psiquiatra, pero Juan decidió superarlo sin ayuda.
Después de un tiempo, Juan llegó un día a casa destrozado. Su mujer advirtió que algo iba mal y le preguntó qué había pasado.
- ¿Te acuerdas que te dije que tenía unas ganas terribles de meter el pene dentro de la cortadora de pepinos?
- Sí, Juan, me acuerdo, ¿no lo habrás hecho?.
- Sí, cariño, no pude resistirme y lo hice.....
- ¡Dios mio! Juan, ¿pero qué te ha pasado?
- No pude.... no puede resistir y, además, me han despedido.
- ¿Despedido?. ¿Por qué?. ¿Por manipular a la cortadora?....
- Exactamente.... y a ella también la han despedido......
Su mujer le recomendó ir a un psiquiatra, pero Juan decidió superarlo sin ayuda.
Después de un tiempo, Juan llegó un día a casa destrozado. Su mujer advirtió que algo iba mal y le preguntó qué había pasado.
- ¿Te acuerdas que te dije que tenía unas ganas terribles de meter el pene dentro de la cortadora de pepinos?
- Sí, Juan, me acuerdo, ¿no lo habrás hecho?.
- Sí, cariño, no pude resistirme y lo hice.....
- ¡Dios mio! Juan, ¿pero qué te ha pasado?
- No pude.... no puede resistir y, además, me han despedido.
- ¿Despedido?. ¿Por qué?. ¿Por manipular a la cortadora?....
- Exactamente.... y a ella también la han despedido......