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"Lo soñamos durante un siglo, lo imaginamos durante dos décadas y lo hemos creado en siete años."
François-Henry Bennahmias, CEO de Audemars Piguet
Más de un siglo después de la producción de su reloj de bolsillo ultracomplicado Universelle, Audemars Piguet presenta su primer reloj de pulsera automático ultracomplicado, nada menos que en la colección Code 11.59 by Audemars Piguet, lo que, una vez más, demuestra la total confianza que su ahora saliente CEO depositó en la colección.
El Code 11.59 by Audemars Piguet Ultracomplicación Universelle RD#4 rinde tributo al reloj de bolsillo L'Universelle, uno de los relojes más complicados de la historia de la Manufactura. Con sus 26 funciones, entre ellas 19 complicaciones clásicas, este reloj de bolsillo se encuentra entre los relojes más complicados del mundo junto al Marie Antoinette de Breguet (1802), La Merveilleuse de Ami LeCoultre (1878), Leroy 01 de Louis Leroy (1900), Henry Graves Supercomplication de Patek Philippe (1933) y Le Cabinotier de Vacheron Constantin 2019), ahí es nada...
Al tiempo que rinde ese tributo, este Code 11:59 se ha diseñado teniendo en cuenta la ergonomía y la intuitividad para ofrecer una comodidad y una simplicidad sin precedentes. Paradójicamente, para conseguir esa simplicidad el calibre automático 1000 cuenta con más de 1.100 componentes. Este prodigio de ingeniería se nutre de tres generaciones de avances en I+D e incorpora 40 (cuarenta) funciones, incluidas 23 complicaciones, entre ellas una Grande Sonnerie Supersonnerie, una repetición de minutos, un calendario perpetuo, un cronógrafo flyback con ratrapante y un tourbillon volante. El trabajo conjunto de ingenieros, diseñadores, relojeros y artesanos durante más de siete años ha permitido dar vida a este reloj RD#4. El proyecto se inició en 2016 con el objetivo de desarrollar un reloj de pulsera ultracomplicado que fuera adecuado para un uso diario (¡!) y lograra el equilibrio perfecto entre complejidad, ergonomía y estética.
Aunque la caja ha conservado tanto la curvatura ergonómica como los códigos de diseño de la colección, sus proporciones se han adaptado ligeramente a este mecanismo ultracomplicado. Esta nueva caja de tan solo 42 mm de diámetro (en lugar de 41 mm) y 15,55 mm de grosor representa una proeza de la ingeniería en sí misma teniendo en cuenta la larga lista de funciones que esconde.
Tres coronas, tres pulsadores... y ningún punzón. Los pulsadores, discretos pero lo suficientemente grandes como para activarse con el dedo, se han integrado en el lado izquierdo de la caja. Mientras que el pulsador superior inicia la función de repetición de minutos, los otros dos permiten corregir las indicaciones de la luna y el día respectivamente.
En el lado derecho de la caja, tres coronas con pulsadores coaxiales permiten al usuario dar cuerda al reloj, ajustar la fecha y la hora con la corona central, y seleccionar el modo de sonería (Grande Sonnerie, Petite Sonnerie o silencio). El cronógrafo flyback se puede poner en marcha y detener con la súper corona situada a las 2 horas, y poner a cero con la otra súper corona situada a las 4 horas.
La corona a las 4 horas corrige también el mes sincronizándolo con el año. Entre las innovaciones, el pulsador ergonómico de la corona (o «súper corona») a las 4 horas introduce un nuevo nivel de corrección. Mientras el pulsador activa el mecanismo de puesta a cero del cronógrafo flyback, la corona también permite la corrección del mes hacia delante o hacia atrás. Además, la corona vuelve automáticamente a su posición neutra después de rotarla (hasta 70°) en cualquier dirección. Esta sencilla explicación lo es gracias a un mecanismo increíblemente complejo en el que también se ha previsto la seguridad para evitar manipulaciones indebidas que lo dañarían. Los pequeños símbolos intuitivos grabados en cada una de las coronas y los pulsadores recuerdan al usuario sus respectivas funciones.
Por nombrar algunas de sus sofisticadas complicaciones:
Grande Sonnerie combinada con la tecnología patentada Supersonnerie.
Un reloj Grande Sonnerie toca las horas y los cuartos al paso sin la intervención del usuario. En la posición de Petite Sonnerie, el reloj solo toca las horas, mientras que en el modo silencioso la sonería automática queda desactivada. Además, el usuario puede activar el mecanismo de repetición de minutos en cualquier momento gracias a la presencia de un pulsador específico a las 10 horas.
El mecanismo Supersonnerie es una tecnología patentada, presentada en 2006, y fue el resultado de ocho años de investigación en colaboración con la EPFL (Escuela Politécnica Federal de Lausana). Los gongs no están unidos a la platina, sino a un componente específico a modo de caja de resonancia que mejora la transmisión del sonido, lo que proporciona al este la potencia acústica, la calidad de sonido y el tono armónico de los relojes con sonería antiguos dotados de grandes cajas. Se ha desarrollado un sistema de doble fondo especial con una tapa extraplana «secreta» y una nueva caja de resonancia, de tan solo 0,6 mm de grosor, íntegramente elaborada en cristal de zafiro, sobre la cual están montados los timbres. La tapa «secreta» presenta una serie de aberturas laterales para dejar pasar el aire y potenciar la amplificación del sonido cuando el reloj descansa en la muñeca. Esta tapa pivotante puede abrirse con la ayuda de una discreta palanca ubicada en el reverso, justo bajo la corona a las 3 horas, para admirar el mecanismo de ratrapante y la masa oscilante de platino.
El mecanismo de calendario perpetuo semigregoriano se ha concebido para optimizar la visualización y el uso de las funciones del calendario, siempre en el mínimo espacio posible. Para ello, el calibre 1000 se fundamenta en las innovaciones patentadas del calibre 5133 lanzado en 2018 con el prototipo Royal Oak Calendario Perpetuo Automático Ultraplano RD#2, que fusionó las funciones del calendario perpetuo en un solo nivel. Para lograrlo, la leva del final de mes se ha integrado también en la rueda de la fecha, mientras que la leva del mes se ha combinado con la rueda del mes.
Las indicaciones del calendario se han disociado de los contadores de cronógrafo y se han organizado simétricamente con el eje vertical. Además de mostrar el día, la fecha grande y el mes a las 9, las 12 y las 3 horas, respectivamente, el reloj indica el año a través de una ventanilla de dos dígitos localizada a las 4 horas. Sincronizado con el mes, el año cambia automáticamente cada vez que la rueda del mes pasa de diciembre a enero. Por consiguiente, el mecanismo de calendario perpetuo semigregoriano hace avanzar automáticamente el día, la fecha y el año teniendo en consideración el número de días por mes, incluidos los años bisiestos, así como la corrección cada 100 años propia de los calendarios perpetuos gregorianos tradicionales.
¿Qué? La mayoría de los calendarios perpetuos sigue el calendario gregoriano, que omite el año bisiesto cuando el año del siglo es divisible por 100, pero no por 400, para ayudar a sincronizar el año civil con el año solar. En este sentido, los calendarios perpetuos tradicionales deben corregirse manualmente en los años 2100, 2200 y 2300. En cambio, el calendario perpetuo semigregoriano del calibre 1000 omite automáticamente al año bisiesto cada 100 años. Por consiguiente, requiere una corrección manual cada 400 años en lugar de cada 100. Déjaselo dicho a tus herederos.
Por último, el Code 11.59 by Audemars Piguet Ultracomplicación Universelle RD#4 incorpora un innovador sistema de luna astronómica con salto instantáneo que transmite una imagen más realista de la Luna. Dos discos concéntricos, estampados con seis posiciones lunares, se combinan para formar diez imágenes fieles de los cuartos creciente y menguante entre la luna nueva y la luna llena, mientras el satélite orbita alrededor de la Tierra en un promedio de 29,53 días. Al igual que otras lunas astronómicas, esta nueva imagen de la Luna requiere una corrección manual cada 122 años, siempre que el reloj se mantenga totalmente armado.
Crono Flyback. Y Ratrapante. Si el cronógrafo flyback permite poner a cero y volver a poner en marcha el cronógrafo sin tener que detenerlo primero, el mecanismo de ratrapante mide los intervalos de tiempo intermedios gracias a la presencia de una aguja ratrapante que puede detenerse independientemente de la aguja del cronógrafo central cuando se activa el pulsador correspondiente. Al volver a presionar el pulsador, esta atrapa a la aguja en movimiento para continuar su trayectoria alrededor de la esfera en perfecta sincronía. La acción se puede repetir a voluntad.
La aguja de la ratrapante y el cronógrafo flyback se puede activar mediante los pulsadores coaxiales de las tres coronas en el lado derecho de la caja. El pulsador a las 2 horas pone en marcha y detiene el cronógrafo, mientras que el pulsador a las 3 horas activa el mecanismo de ratrapante. Por último, el pulsador a las 4 activa los mecanismos de flyback y puesta a cero.
La arquitectura del mecanismo cronógrafo se ha remodelado para ganar espacio y revelar componentes habitualmente ocultos en el lado del fondo. Uno de los grandes avances ha sido la integración del mecanismo de ratrapante en el grosor del cojinete de bolas del rotor central. Al fusionar dos sistemas habitualmente superpuestos, se consigue el grosor del movimiento en 1,1 mm, a la vez que deja expuesto el mecanismo de ratrapante gracias a la apertura de la tapa «secreta» del reloj.
Parecería que un reloj ultracomplicado no sería digno de tal apelativo sin un tourbillon. Para optimizar la distribución y la eficiencia de la energía, el calibre 1000 incluye un nuevo oscilador de mayor amplitud. Para evitar que el reloj se detenga cuando todas las funciones estén en marcha, la geometría del escape se ha repensado para aumentar la amplitud del volante y eliminar los impactos ocasionados por la transferencia de una excesiva energía del escape al oscilador. Esta solución también ha exigido aumentar la energía del movimiento de base, preservando la frecuencia de 21.600 alt/h para realzar la belleza del tourbillon volante por el lado de la esfera. Así pues, se ha desarrollado un barrilete principal mayor para impulsar tanto las agujas como las funciones de cronógrafo y calendario, mientras que las funciones de sonería se alimentan mediante un barrilete específico. El resultado, 60 horas de reserva de marcha. Segundero saltante, segundos muertos, Gran Sonería Carillon... la lista de complicaciones que alberga sigue.
En 2023 se introducirán cuatro versiones del modelo de oro blanco o rosa de 18 quilates, cada una de ellas con una esfera diferente. Dos de ellas serán esqueleteadas para poder sumergirse en el intrincado mecanismo sin necesidad de quitarse el reloj de la muñeca. Todos ellos llegan acompañados de una correa de aligátor y otra de becerro con revestimiento de caucho.
Un poco de historia.
Audemars Piguet entregó el movimiento Universelle al relojero alemán Dürrstein, Uhrenfabrik Union Glasshütte en 1899, junto con dos mecanismos ultracomplicados similares, que se acabarían años más tarde. Los tres calibres incorporaban movimientos en bruto Louis Elisée Piguet y funciones semejantes, su diámetro variaba bastante. L'Universelle era el más pequeño de los tres con un calibre de 22 líneas (49,5 mm), y contenía 1.168 componentes, incluidos 316 tornillos.
Después de una serie de intercambios entre ambos talleres, el 12 de agosto de 1900 se presentó un modelo inacabado en una feria de relojería en Leipzig (Die Leipziger Uhren-Austellung). El reloj de bolsillo se anunció por primera vez en la prensa alemana en 1901 bajo el nombre «Universal-Uhr» antes de aparecer en el catálogo de Dürrstein hasta la década de 1920.
Tras estar "desaparecido" durante décadas, L'Universelle reapareció en 1993 en una subasta organizada por Sotheby's donde fue adquirido por un reputado coleccionista británico de relojes Audemars Piguet antiguos. El reloj de bolsillo sufrió cambios importantes en el año 2001, cuando se encajó el movimiento en platino y se personalizó la esfera al gusto del propietario.
L'Universelle regresó al taller de restauración de Audemars Piguet en 2012, donde fue totalmente restaurado y encajado en su caja de oro rosa original por dos expertos relojeros de Audemars Piguet, en una meticulosa tarea de cuatro años de duración. Adquirido por la Manufactura en 2016, ha encontrado hoy un espacio inmejorable en el centro de la exposición permanente del Musée Atelier Audemars Piguet, rodeado por ocho relojes Gran Complicación que han marcado un hito en la historia de la Manufactura.
François-Henry Bennahmias, CEO de Audemars Piguet
Más de un siglo después de la producción de su reloj de bolsillo ultracomplicado Universelle, Audemars Piguet presenta su primer reloj de pulsera automático ultracomplicado, nada menos que en la colección Code 11.59 by Audemars Piguet, lo que, una vez más, demuestra la total confianza que su ahora saliente CEO depositó en la colección.
El Code 11.59 by Audemars Piguet Ultracomplicación Universelle RD#4 rinde tributo al reloj de bolsillo L'Universelle, uno de los relojes más complicados de la historia de la Manufactura. Con sus 26 funciones, entre ellas 19 complicaciones clásicas, este reloj de bolsillo se encuentra entre los relojes más complicados del mundo junto al Marie Antoinette de Breguet (1802), La Merveilleuse de Ami LeCoultre (1878), Leroy 01 de Louis Leroy (1900), Henry Graves Supercomplication de Patek Philippe (1933) y Le Cabinotier de Vacheron Constantin 2019), ahí es nada...
Al tiempo que rinde ese tributo, este Code 11:59 se ha diseñado teniendo en cuenta la ergonomía y la intuitividad para ofrecer una comodidad y una simplicidad sin precedentes. Paradójicamente, para conseguir esa simplicidad el calibre automático 1000 cuenta con más de 1.100 componentes. Este prodigio de ingeniería se nutre de tres generaciones de avances en I+D e incorpora 40 (cuarenta) funciones, incluidas 23 complicaciones, entre ellas una Grande Sonnerie Supersonnerie, una repetición de minutos, un calendario perpetuo, un cronógrafo flyback con ratrapante y un tourbillon volante. El trabajo conjunto de ingenieros, diseñadores, relojeros y artesanos durante más de siete años ha permitido dar vida a este reloj RD#4. El proyecto se inició en 2016 con el objetivo de desarrollar un reloj de pulsera ultracomplicado que fuera adecuado para un uso diario (¡!) y lograra el equilibrio perfecto entre complejidad, ergonomía y estética.
Aunque la caja ha conservado tanto la curvatura ergonómica como los códigos de diseño de la colección, sus proporciones se han adaptado ligeramente a este mecanismo ultracomplicado. Esta nueva caja de tan solo 42 mm de diámetro (en lugar de 41 mm) y 15,55 mm de grosor representa una proeza de la ingeniería en sí misma teniendo en cuenta la larga lista de funciones que esconde.
Tres coronas, tres pulsadores... y ningún punzón. Los pulsadores, discretos pero lo suficientemente grandes como para activarse con el dedo, se han integrado en el lado izquierdo de la caja. Mientras que el pulsador superior inicia la función de repetición de minutos, los otros dos permiten corregir las indicaciones de la luna y el día respectivamente.
En el lado derecho de la caja, tres coronas con pulsadores coaxiales permiten al usuario dar cuerda al reloj, ajustar la fecha y la hora con la corona central, y seleccionar el modo de sonería (Grande Sonnerie, Petite Sonnerie o silencio). El cronógrafo flyback se puede poner en marcha y detener con la súper corona situada a las 2 horas, y poner a cero con la otra súper corona situada a las 4 horas.
La corona a las 4 horas corrige también el mes sincronizándolo con el año. Entre las innovaciones, el pulsador ergonómico de la corona (o «súper corona») a las 4 horas introduce un nuevo nivel de corrección. Mientras el pulsador activa el mecanismo de puesta a cero del cronógrafo flyback, la corona también permite la corrección del mes hacia delante o hacia atrás. Además, la corona vuelve automáticamente a su posición neutra después de rotarla (hasta 70°) en cualquier dirección. Esta sencilla explicación lo es gracias a un mecanismo increíblemente complejo en el que también se ha previsto la seguridad para evitar manipulaciones indebidas que lo dañarían. Los pequeños símbolos intuitivos grabados en cada una de las coronas y los pulsadores recuerdan al usuario sus respectivas funciones.
Por nombrar algunas de sus sofisticadas complicaciones:
Grande Sonnerie combinada con la tecnología patentada Supersonnerie.
Un reloj Grande Sonnerie toca las horas y los cuartos al paso sin la intervención del usuario. En la posición de Petite Sonnerie, el reloj solo toca las horas, mientras que en el modo silencioso la sonería automática queda desactivada. Además, el usuario puede activar el mecanismo de repetición de minutos en cualquier momento gracias a la presencia de un pulsador específico a las 10 horas.
El mecanismo Supersonnerie es una tecnología patentada, presentada en 2006, y fue el resultado de ocho años de investigación en colaboración con la EPFL (Escuela Politécnica Federal de Lausana). Los gongs no están unidos a la platina, sino a un componente específico a modo de caja de resonancia que mejora la transmisión del sonido, lo que proporciona al este la potencia acústica, la calidad de sonido y el tono armónico de los relojes con sonería antiguos dotados de grandes cajas. Se ha desarrollado un sistema de doble fondo especial con una tapa extraplana «secreta» y una nueva caja de resonancia, de tan solo 0,6 mm de grosor, íntegramente elaborada en cristal de zafiro, sobre la cual están montados los timbres. La tapa «secreta» presenta una serie de aberturas laterales para dejar pasar el aire y potenciar la amplificación del sonido cuando el reloj descansa en la muñeca. Esta tapa pivotante puede abrirse con la ayuda de una discreta palanca ubicada en el reverso, justo bajo la corona a las 3 horas, para admirar el mecanismo de ratrapante y la masa oscilante de platino.
El mecanismo de calendario perpetuo semigregoriano se ha concebido para optimizar la visualización y el uso de las funciones del calendario, siempre en el mínimo espacio posible. Para ello, el calibre 1000 se fundamenta en las innovaciones patentadas del calibre 5133 lanzado en 2018 con el prototipo Royal Oak Calendario Perpetuo Automático Ultraplano RD#2, que fusionó las funciones del calendario perpetuo en un solo nivel. Para lograrlo, la leva del final de mes se ha integrado también en la rueda de la fecha, mientras que la leva del mes se ha combinado con la rueda del mes.
Las indicaciones del calendario se han disociado de los contadores de cronógrafo y se han organizado simétricamente con el eje vertical. Además de mostrar el día, la fecha grande y el mes a las 9, las 12 y las 3 horas, respectivamente, el reloj indica el año a través de una ventanilla de dos dígitos localizada a las 4 horas. Sincronizado con el mes, el año cambia automáticamente cada vez que la rueda del mes pasa de diciembre a enero. Por consiguiente, el mecanismo de calendario perpetuo semigregoriano hace avanzar automáticamente el día, la fecha y el año teniendo en consideración el número de días por mes, incluidos los años bisiestos, así como la corrección cada 100 años propia de los calendarios perpetuos gregorianos tradicionales.
¿Qué? La mayoría de los calendarios perpetuos sigue el calendario gregoriano, que omite el año bisiesto cuando el año del siglo es divisible por 100, pero no por 400, para ayudar a sincronizar el año civil con el año solar. En este sentido, los calendarios perpetuos tradicionales deben corregirse manualmente en los años 2100, 2200 y 2300. En cambio, el calendario perpetuo semigregoriano del calibre 1000 omite automáticamente al año bisiesto cada 100 años. Por consiguiente, requiere una corrección manual cada 400 años en lugar de cada 100. Déjaselo dicho a tus herederos.
Por último, el Code 11.59 by Audemars Piguet Ultracomplicación Universelle RD#4 incorpora un innovador sistema de luna astronómica con salto instantáneo que transmite una imagen más realista de la Luna. Dos discos concéntricos, estampados con seis posiciones lunares, se combinan para formar diez imágenes fieles de los cuartos creciente y menguante entre la luna nueva y la luna llena, mientras el satélite orbita alrededor de la Tierra en un promedio de 29,53 días. Al igual que otras lunas astronómicas, esta nueva imagen de la Luna requiere una corrección manual cada 122 años, siempre que el reloj se mantenga totalmente armado.
Crono Flyback. Y Ratrapante. Si el cronógrafo flyback permite poner a cero y volver a poner en marcha el cronógrafo sin tener que detenerlo primero, el mecanismo de ratrapante mide los intervalos de tiempo intermedios gracias a la presencia de una aguja ratrapante que puede detenerse independientemente de la aguja del cronógrafo central cuando se activa el pulsador correspondiente. Al volver a presionar el pulsador, esta atrapa a la aguja en movimiento para continuar su trayectoria alrededor de la esfera en perfecta sincronía. La acción se puede repetir a voluntad.
La aguja de la ratrapante y el cronógrafo flyback se puede activar mediante los pulsadores coaxiales de las tres coronas en el lado derecho de la caja. El pulsador a las 2 horas pone en marcha y detiene el cronógrafo, mientras que el pulsador a las 3 horas activa el mecanismo de ratrapante. Por último, el pulsador a las 4 activa los mecanismos de flyback y puesta a cero.
La arquitectura del mecanismo cronógrafo se ha remodelado para ganar espacio y revelar componentes habitualmente ocultos en el lado del fondo. Uno de los grandes avances ha sido la integración del mecanismo de ratrapante en el grosor del cojinete de bolas del rotor central. Al fusionar dos sistemas habitualmente superpuestos, se consigue el grosor del movimiento en 1,1 mm, a la vez que deja expuesto el mecanismo de ratrapante gracias a la apertura de la tapa «secreta» del reloj.
Parecería que un reloj ultracomplicado no sería digno de tal apelativo sin un tourbillon. Para optimizar la distribución y la eficiencia de la energía, el calibre 1000 incluye un nuevo oscilador de mayor amplitud. Para evitar que el reloj se detenga cuando todas las funciones estén en marcha, la geometría del escape se ha repensado para aumentar la amplitud del volante y eliminar los impactos ocasionados por la transferencia de una excesiva energía del escape al oscilador. Esta solución también ha exigido aumentar la energía del movimiento de base, preservando la frecuencia de 21.600 alt/h para realzar la belleza del tourbillon volante por el lado de la esfera. Así pues, se ha desarrollado un barrilete principal mayor para impulsar tanto las agujas como las funciones de cronógrafo y calendario, mientras que las funciones de sonería se alimentan mediante un barrilete específico. El resultado, 60 horas de reserva de marcha. Segundero saltante, segundos muertos, Gran Sonería Carillon... la lista de complicaciones que alberga sigue.
En 2023 se introducirán cuatro versiones del modelo de oro blanco o rosa de 18 quilates, cada una de ellas con una esfera diferente. Dos de ellas serán esqueleteadas para poder sumergirse en el intrincado mecanismo sin necesidad de quitarse el reloj de la muñeca. Todos ellos llegan acompañados de una correa de aligátor y otra de becerro con revestimiento de caucho.
Un poco de historia.
Audemars Piguet entregó el movimiento Universelle al relojero alemán Dürrstein, Uhrenfabrik Union Glasshütte en 1899, junto con dos mecanismos ultracomplicados similares, que se acabarían años más tarde. Los tres calibres incorporaban movimientos en bruto Louis Elisée Piguet y funciones semejantes, su diámetro variaba bastante. L'Universelle era el más pequeño de los tres con un calibre de 22 líneas (49,5 mm), y contenía 1.168 componentes, incluidos 316 tornillos.
Después de una serie de intercambios entre ambos talleres, el 12 de agosto de 1900 se presentó un modelo inacabado en una feria de relojería en Leipzig (Die Leipziger Uhren-Austellung). El reloj de bolsillo se anunció por primera vez en la prensa alemana en 1901 bajo el nombre «Universal-Uhr» antes de aparecer en el catálogo de Dürrstein hasta la década de 1920.
Tras estar "desaparecido" durante décadas, L'Universelle reapareció en 1993 en una subasta organizada por Sotheby's donde fue adquirido por un reputado coleccionista británico de relojes Audemars Piguet antiguos. El reloj de bolsillo sufrió cambios importantes en el año 2001, cuando se encajó el movimiento en platino y se personalizó la esfera al gusto del propietario.
L'Universelle regresó al taller de restauración de Audemars Piguet en 2012, donde fue totalmente restaurado y encajado en su caja de oro rosa original por dos expertos relojeros de Audemars Piguet, en una meticulosa tarea de cuatro años de duración. Adquirido por la Manufactura en 2016, ha encontrado hoy un espacio inmejorable en el centro de la exposición permanente del Musée Atelier Audemars Piguet, rodeado por ocho relojes Gran Complicación que han marcado un hito en la historia de la Manufactura.
