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Trotante24
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Buenas a todos.
Mi relación con los relojes viene marcada, como tantas cosas por la infancia. Creo que no tendría más de 7-8 años cuando me regalaron mis padres el primer reloj, del que por supuesto no recuerdo ni modelo ni marca, pero si lo feliz que me hizo. Exactamente igual que recuerdo el disgusto cuando a los pocos días se rompió. Nada extraño, siendo un niño "inquieto" en un pueblo, pasándome el día en la calle, con la bicicleta, el fútbol, las guerras a pedradas...cosas de los ochenta.
El mismo destino sufrieron los siguientes relojes que llegaron a mi muñeca (el de la Comunión, un reloj transformer que me regaló el abuelo y era lo más de lo más...).
Así que muy joven llegue a una conclusión clara y evidente: me gustaban lo relojes, pero eran incompatibles conmigo.
Esta idea me ha acompañado varias décadas, en las que he desarrollado una muy buena capacidad para calcular la hora del día sin reloj con bastante exactitud y no he tenido ni querido relojes.
Hace unos años me regalaron una smartband al comprar un móvil. Al ser de diseño fino en comparación a un reloj tradicional, y ya con una vida bastante sedentaria, me anime a probarla y me fue bien, con lo que me acostumbre a llevar algo en la muñeca.
El siguiente paso fue un ewatch con el que estoy muy contento, a pesar que hay cargarlo casi a diario.
Y entonces un día me desperté pensando que ya era hora (nunca mejor dicho) de tener un reloj "de verdad".
Ya sabéis como es ahora, una vez googleas Rolex Submariner y Seiko ya toda la vida digital se convierte en anuncios de Larralbe, shorts de gente con Tsuyosas, en chollometro no hacen más que salir relojes del "mercado gris", recordatorios de aliexpress de que aún tienen en la cesta el Invicta ...
Total, digamos que ese día fue hace una semana y ahora estoy obsesionado con los fucking watchs, y NECESITO no un reloj, sino mi propia CAJA de relojes (en otros ámbitos colección) con mis GRIALES (que aún no se cuales son). Así que parece ser que me ha picado el bicho.
Y claro, como novato "experto de cuatro ratos" he llegado a catawiki, y ya he tenido la increíble suerte (guiño guiño) de llevarme mi primera subasta sin precio mínimo, y al parecer en unos días me va a llegar un reloj que no me gusta ni un poco, y que no me pondré a priori ni para bajar a tirar la basura...mi primera "catagada", vamos.
Mi mujer, que si tiene unos cuantos relojes, buen gusto y sentido común, me ha dicho "Como puedes comprar esa cosa tan fea..."
Me he intentado defender argumentando que es una "marca de lujo" (Maurice Lacroix), y que era una ganga por 120€ puesto en casa...
Miedo me da el día que llegue, y ese estado "Bien: signos visibles de desgaste". Con suerte dará bien la hora dos veces al día
. Como no, y para cerrar el círculo, es de la misma época en que me convencí de que los relojes no eran para mi...quizás esta compra sea mi particular vacuna contra la CRI.
Saludos y gracias por leer hasta el final.
P.D. No pongo fotos de mi adquisición por no ofender el buen gusto de la comunidad. Si alguien insiste en tener pruebas documentales, será responsable último de las consecuencias.
Mi relación con los relojes viene marcada, como tantas cosas por la infancia. Creo que no tendría más de 7-8 años cuando me regalaron mis padres el primer reloj, del que por supuesto no recuerdo ni modelo ni marca, pero si lo feliz que me hizo. Exactamente igual que recuerdo el disgusto cuando a los pocos días se rompió. Nada extraño, siendo un niño "inquieto" en un pueblo, pasándome el día en la calle, con la bicicleta, el fútbol, las guerras a pedradas...cosas de los ochenta.
El mismo destino sufrieron los siguientes relojes que llegaron a mi muñeca (el de la Comunión, un reloj transformer que me regaló el abuelo y era lo más de lo más...).
Así que muy joven llegue a una conclusión clara y evidente: me gustaban lo relojes, pero eran incompatibles conmigo.
Esta idea me ha acompañado varias décadas, en las que he desarrollado una muy buena capacidad para calcular la hora del día sin reloj con bastante exactitud y no he tenido ni querido relojes.
Hace unos años me regalaron una smartband al comprar un móvil. Al ser de diseño fino en comparación a un reloj tradicional, y ya con una vida bastante sedentaria, me anime a probarla y me fue bien, con lo que me acostumbre a llevar algo en la muñeca.
El siguiente paso fue un ewatch con el que estoy muy contento, a pesar que hay cargarlo casi a diario.
Y entonces un día me desperté pensando que ya era hora (nunca mejor dicho) de tener un reloj "de verdad".
Ya sabéis como es ahora, una vez googleas Rolex Submariner y Seiko ya toda la vida digital se convierte en anuncios de Larralbe, shorts de gente con Tsuyosas, en chollometro no hacen más que salir relojes del "mercado gris", recordatorios de aliexpress de que aún tienen en la cesta el Invicta ...
Total, digamos que ese día fue hace una semana y ahora estoy obsesionado con los fucking watchs, y NECESITO no un reloj, sino mi propia CAJA de relojes (en otros ámbitos colección) con mis GRIALES (que aún no se cuales son). Así que parece ser que me ha picado el bicho.
Y claro, como novato "experto de cuatro ratos" he llegado a catawiki, y ya he tenido la increíble suerte (guiño guiño) de llevarme mi primera subasta sin precio mínimo, y al parecer en unos días me va a llegar un reloj que no me gusta ni un poco, y que no me pondré a priori ni para bajar a tirar la basura...mi primera "catagada", vamos.
Mi mujer, que si tiene unos cuantos relojes, buen gusto y sentido común, me ha dicho "Como puedes comprar esa cosa tan fea..."
Me he intentado defender argumentando que es una "marca de lujo" (Maurice Lacroix), y que era una ganga por 120€ puesto en casa...
Miedo me da el día que llegue, y ese estado "Bien: signos visibles de desgaste". Con suerte dará bien la hora dos veces al día
. Como no, y para cerrar el círculo, es de la misma época en que me convencí de que los relojes no eran para mi...quizás esta compra sea mi particular vacuna contra la CRI.Saludos y gracias por leer hasta el final.
P.D. No pongo fotos de mi adquisición por no ofender el buen gusto de la comunidad. Si alguien insiste en tener pruebas documentales, será responsable último de las consecuencias.
(y quizás yo sin comer 
)
