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Yo que trabajo cara al público entiendo que esto lo dices de coña, no? jajajajaPor suerte el Covid sacó lo mejor de nosotros como sociedad, entre aplausos, solidaridad y respeto por el prójimo, nadie se quedó atrás y conseguimos salir más fuertes.
Si algo se ha respirado durante estos últimos tres años ha sido entendimiento entre las gentes, respeto por las decisiones contrarias y libertad de elección sin ningún tipo de presión.Yo que trabajo cara al público entiendo que esto lo dices de coña, no? jajajaja
Y trabajo en equipo. En medio de una pandemia mundial que llegó a matar a mil personas al día en España (creo diariamente en Ucrania están muriendo menos) todo el mundo entendió que vivimos en sociedad, nuestras acciones tienen consecuencias sobre los demás y a veces toca arrimar el hombro porque somos una sociedad y no cabras montesas que viven en una cueva.Si algo se ha respirado durante estos últimos tres años ha sido entendimiento entre las gentes, respeto por las decisiones contrarias y libertad de elección sin ningún tipo de presión.
Estoy de acuerdo con usted, en un momento de crisis donde peligra nuestra existencia, debemos dejar a un lado el criterio y el sentido común y obedecer ciegamente los mandatos políticos, porque para eso nos representan y siempre van a estar mirando por nuestro bienestar. En un caso de emergencia sanitaria todos sabemos que la corrupción se queda a un lado y la filantropía se encarga de guiar nuestro destino.Y trabajo en equipo. En medio de una pandemia mundial que llegó a matar a mil personas al día en España (creo diariamente en Ucrania están muriendo menos) todo el mundo entendió que vivimos en sociedad, nuestras acciones tienen consecuencias sobre los demás y a veces toca arrimar el hombro porque somos una sociedad y no cabras montesas que viven en una cueva.
Y por supuesto nadie se dedicó a llamar bozal a las mascarillas, a pesar de que bozal una palabra totalmente educada y neutral que no puede utilizarse con segundas para tocar las narices a los que se pusieron las mascarillas para que esto terminase de una santa vez, que nadie se la puso por hobby.
Eh, pero presión social, ¿eh? El tema de pandemias que matan gente ya sí tal.
Depende de la base numérica.
Y vuelta la burra al trigo cada vez que alguien se permite salirse del discurso oficial...hay que ir a por él en un tono jocoso e irónico para intentar desacreditar su opinión.
Hay algunos que no quieren volver a la normalidad, parece que les encanta la pandemia y el estado de alarma, aunque sea para poder abrir hilos en un foro.Lógico. Era una decisión que tenía que llegar. Gracias a las vacunas se ha vencido a la pandemia y ahora hay que volver a la normalidad.
Estoy de acuerdo con usted, en un momento de crisis donde peligra nuestra existencia, debemos dejar a un lado el criterio y el sentido común y obedecer ciegamente los mandatos políticos, porque para eso nos representan y siempre van a estar mirando por nuestro bienestar. En un caso de emergencia sanitaria todos sabemos que la corrupción se queda a un lado y la filantropía se encarga de guiar nuestro destino.
Como sociedad debemos seguir aquellas directrices que nos marcan los expertos en la materia, independientemente de que luego éstos no hayan existido jamás y las directrices no hayan tenido base científica. Debemos confiar en los productos que nos ofrecen las farmacéuticas, aunque se prohíban posteriormente en favor de otras versiones seguras. Las medidas que se aplican mediante políticas cuestionables han de seguirse a rajatabla, porque incluso si son absurdas están pensadas para proteger a ciudadanos como usted o como yo, y como sociedad debemos estar unidos y no valorar si son correctas. Como aquella vez que demostramos empíricamente que estar encerrados evitaba el contagio, mientras valientes políticos se arriesgaban en novedosos estudios científicos para protegernos del virus a través de cenas multitudinarias, consumo de estupefacientes y prácticas sexuales. Estudio que resultó un éxito.
Gracias a los medios de información hemos conocido día a día los progresos de nuestros esfuerzos como sociedad, sin entrar en el sensacionalismo, sin mentiras, sin señalar a esa parte de la población descreída.
Nuestros responsables siempre han mirado por nuestra seguridad, sin caer en ningún momento en el abuso y enriquecimiento económico, por eso, productos necesarios y obligados como las mascarillas se han repartido entre la población aplicando las tasas mínimas de impuestos.
Estoy orgulloso de haber formado parte de todo ésto, de haber salvado vidas. Recuerdo aquellos excursionistas gallegos con su mascarilla por el monte a los que salvé, gracias a que yo también me puse la mascarilla en mi coche por el centro de Santander.
Me miro al espejo, respiro profundamente y me digo: "Sé responsable una vez más, ponte la mascarilla y ve a la farmacia. Salva un par de vidas más".
Pues yo supongo que debí matar 3000 o 4000 tontos por ir dentro de mi coche sin mascarilla.Recuerdo aquellos excursionistas gallegos con su mascarilla por el monte a los que salvé, gracias a que yo también me puse la mascarilla en mi coche por el centro de Santander.
¿Aún sigues con eso?Ya he quemado en la hoguera de San Juan el único boz... mascarilla que he usado en estos Años Oscuros. Un humo negro, cargado de un mal que no es de este mundo, ha ascendido hasta una siniestra apertura en los cielos desapareciendo con un infernal estruendo.
Hay que despedir una época, los que montaron el circo están con la traca final de noticias. Ahora ya sí parece que desaparece el último vestigio de algo que nunca tuvo sentido alguno y que fue un dogma de fe para la población.¿Aún sigues con eso?
Queda claro…Cada loco con su tema
Contra gustos no hay disputas
Artefactos, bestias, hombres y mujeres
Cada uno es como es
Cada quién es cada cual
Y baja las escaleras como quiere
Pero, puestos a escoger, soy partidario
De las voces de la calle
Más que del diccionario
Me privan más los barrios
Que el centro de la ciudad
Y los artesanos más que la factoría
La razón que la fuerza
El instinto que la urbanidad
Y un siux más que el Séptimo de Caballería
Prefiero los caminos a las fronteras
Y una mariposa al Rockefeller Center
Y el farero de Capdepera
Al vigía de Occidente
Prefiero querer a poder
Palpar a pisar
Ganar a perder
Besar a reñir
Bailar a desfilar
Y disfrutar a medir
Prefiero volar a correr
Hacer a pensar
Amar a querer
Tomar a pedir
Antes que nada soy
Partidario de vivir
Cada loco con su tema
Contra gustos no hay disputas
Artefactos, bestias, hombres y mujeres
Cada uno es como es
Cada quién es cada cual
Y baja las escaleras como quiere
Pero, puestos a escoger, prefiero
Un buen polvo a un rapapolvo
Y un bombero a un bombardero
Crecer a sentar cabeza, prefiero
La carne al metal
Y las ventanas a las ventanillas
El lunar de tu cara
A la Pinacoteca Nacional
Y la revolución a las pesadillas
Prefiero, el tiempo al oro
La vida al sueño
El perro al collar
Las nueces al ruido
Y al sabio por conocer
Que a los locos conocidos
Prefiero, querer a poder
Palpar a pisar
Ganar a perder
Besar a reñir
Bailar a desfilar
Y disfrutar a medir
Prefiero volar a correr
Hacer a pensar
Amar a querer
Tomar a pedir
Antes que nada soy
Partidario de vivir
Totalmente de acuerdo, por algo nací en el MediterráneoCada loco con su tema
Contra gustos no hay disputas
Artefactos, bestias, hombres y mujeres
Cada uno es como es
Cada quién es cada cual
Y baja las escaleras como quiere
Pero, puestos a escoger, soy partidario
De las voces de la calle
Más que del diccionario
Me privan más los barrios
Que el centro de la ciudad
Y los artesanos más que la factoría
La razón que la fuerza
El instinto que la urbanidad
Y un siux más que el Séptimo de Caballería
Prefiero los caminos a las fronteras
Y una mariposa al Rockefeller Center
Y el farero de Capdepera
Al vigía de Occidente
Prefiero querer a poder
Palpar a pisar
Ganar a perder
Besar a reñir
Bailar a desfilar
Y disfrutar a medir
Prefiero volar a correr
Hacer a pensar
Amar a querer
Tomar a pedir
Antes que nada soy
Partidario de vivir
Cada loco con su tema
Contra gustos no hay disputas
Artefactos, bestias, hombres y mujeres
Cada uno es como es
Cada quién es cada cual
Y baja las escaleras como quiere
Pero, puestos a escoger, prefiero
Un buen polvo a un rapapolvo
Y un bombero a un bombardero
Crecer a sentar cabeza, prefiero
La carne al metal
Y las ventanas a las ventanillas
El lunar de tu cara
A la Pinacoteca Nacional
Y la revolución a las pesadillas
Prefiero, el tiempo al oro
La vida al sueño
El perro al collar
Las nueces al ruido
Y al sabio por conocer
Que a los locos conocidos
Prefiero, querer a poder
Palpar a pisar
Ganar a perder
Besar a reñir
Bailar a desfilar
Y disfrutar a medir
Prefiero volar a correr
Hacer a pensar
Amar a querer
Tomar a pedir
Antes que nada soy
Partidario de vivir