Osinar
Forer@ Senior
Sin verificar
Sí, discrepan. Y mi enciclopédica ignorancia relojera no logra salir de la duda. ¿Porqué discrepan?.
Quizá he de poneros en antecedentes. Una de mis "costumbres" (porque si lo hiciera otra persona lo llamaría "manía") consiste en que la aguja del minutero debe estar exactamente en el indicador de minuto-en-punto en el mismito instante en que la aguja del segundero pasa por las doce. O sea, no soporto que el segundero me diga que es minuto-en-punto y simultáneamente el minutero vaya por entre dos indicadores diciendo -en grave desdoro de su pequeña compañera- que no es minuto-en-punto sino minuto-y-pico. No creáis que obtener la satisfacción de esta comezón mía es siempre sencillo, porque hay cada holgura al ponerlos en hora...
Bajo la perspectiva de esa costumbre, resulta que algunas veces -no demasiadas, sólo cuando me apetece gravemente- activo el cronómetro sin necesidad; quizá por el mero y sano gustirrinín de ver moverse a mi reloj de un modo más patente.
En consistencia con la costumbre mentada, cuando tengo el recién descrito apetecer, naturalmente activo el crono en el preciso instante en que la agujita del segundero-normal-del-reloj pasa por las doce en punto. De ese trabajoso modo, consigo que mi costumbre de portar un minutero perfectamente ajustado a sus rayitas se cumpla con ambos segunderos, que en consecuencia pululan siempre a la par, a la exactísima par. Tal desazón me causa si van disparejos ambos, que cuando semejante desgracia sucede por descuido detengo el crono hasta que vuelve el segunderito a transitar por su repetido mediodía, momento en que vuelvo a activarlo para que casen sus itinerarios y ritmos.
Ya me ha dicho el médico que no es grave, así que podéis ahorraros las condolencias y las recomendaciones de psiquiatras.
Pero a lo que iba. Ayer me dio por activar el crono de un Hami con 7750. Recuerdo con toda claridad que al rato lo miré y había un ínfimo e intolerable desajuste entre ambos segunderos: el del reloj estaba unos minimicromilimetrines por delante del del crono. Por supuesto, lo detuve, aguardé a que pasara otra vez el pequeñín por las doce, y activé certeramente el crono nuevamente en ese momento. Comprobé -lo juro- que ambos segunderos caminaban exactamente parejos. Y ahí quedó la cosa.
Anoche debí olvidarme de parar el crono (para qué dejarlo activo mientras duermo) y hace un rato me he dado cuenta de que seguía funcionando. Hasta aquí, nada grave.
Pero ¡oh, tragedia! ¡oh, desastre! Me he percatado de que ahora los dos segunderos no caminaban ya al estricto unísono, sino que el del crono iba con un tamito de retraso respecto al del segunderito normal. ¡Discrepan!. Hacía apenas 18 ó 20 horas que les había conciliado con la máxima fineza, y al cabo de ese tiempo ¡discrepan!. Naturalmente, no estoy dispuesto a consentir tamaña afrenta, por lo que he procedido a corregir la irregularidad.
Pero claro, una es de natural ciertamente indagatriz. Por eso os pregunto: ¿porqué sucede esto? ¿no traen causa ambos segunderos del mismo mecanismo (y valga el repeticionismo)? ¿no deberían caminar juntos dos carros tirados por el mismo buey, siempre y en todo caso? ¿es posible que, a mis ignorandas, se esté produciendo un íntimo drama en los interiores de mi Hami? ¿porqué? ¿porqué discrepan así? ¿hay alguna explicación de índole tecnética, o debo considerarlo desde la perpectiva de la cabalística?.
Por si alguna de vuestras sapientísimas almas se apiada de este prurito que hace ya un buen rato que me tiene frito (y de nuevo perdón, que me repito). Expliquen, por favor, el origen de ese desazonante fenómeno.
Pues gracias por si alguien me calma. Saludos. Osinar.
Quizá he de poneros en antecedentes. Una de mis "costumbres" (porque si lo hiciera otra persona lo llamaría "manía") consiste en que la aguja del minutero debe estar exactamente en el indicador de minuto-en-punto en el mismito instante en que la aguja del segundero pasa por las doce. O sea, no soporto que el segundero me diga que es minuto-en-punto y simultáneamente el minutero vaya por entre dos indicadores diciendo -en grave desdoro de su pequeña compañera- que no es minuto-en-punto sino minuto-y-pico. No creáis que obtener la satisfacción de esta comezón mía es siempre sencillo, porque hay cada holgura al ponerlos en hora...
Bajo la perspectiva de esa costumbre, resulta que algunas veces -no demasiadas, sólo cuando me apetece gravemente- activo el cronómetro sin necesidad; quizá por el mero y sano gustirrinín de ver moverse a mi reloj de un modo más patente.
En consistencia con la costumbre mentada, cuando tengo el recién descrito apetecer, naturalmente activo el crono en el preciso instante en que la agujita del segundero-normal-del-reloj pasa por las doce en punto. De ese trabajoso modo, consigo que mi costumbre de portar un minutero perfectamente ajustado a sus rayitas se cumpla con ambos segunderos, que en consecuencia pululan siempre a la par, a la exactísima par. Tal desazón me causa si van disparejos ambos, que cuando semejante desgracia sucede por descuido detengo el crono hasta que vuelve el segunderito a transitar por su repetido mediodía, momento en que vuelvo a activarlo para que casen sus itinerarios y ritmos.
Ya me ha dicho el médico que no es grave, así que podéis ahorraros las condolencias y las recomendaciones de psiquiatras.
Pero a lo que iba. Ayer me dio por activar el crono de un Hami con 7750. Recuerdo con toda claridad que al rato lo miré y había un ínfimo e intolerable desajuste entre ambos segunderos: el del reloj estaba unos minimicromilimetrines por delante del del crono. Por supuesto, lo detuve, aguardé a que pasara otra vez el pequeñín por las doce, y activé certeramente el crono nuevamente en ese momento. Comprobé -lo juro- que ambos segunderos caminaban exactamente parejos. Y ahí quedó la cosa.
Anoche debí olvidarme de parar el crono (para qué dejarlo activo mientras duermo) y hace un rato me he dado cuenta de que seguía funcionando. Hasta aquí, nada grave.
Pero ¡oh, tragedia! ¡oh, desastre! Me he percatado de que ahora los dos segunderos no caminaban ya al estricto unísono, sino que el del crono iba con un tamito de retraso respecto al del segunderito normal. ¡Discrepan!. Hacía apenas 18 ó 20 horas que les había conciliado con la máxima fineza, y al cabo de ese tiempo ¡discrepan!. Naturalmente, no estoy dispuesto a consentir tamaña afrenta, por lo que he procedido a corregir la irregularidad.
Pero claro, una es de natural ciertamente indagatriz. Por eso os pregunto: ¿porqué sucede esto? ¿no traen causa ambos segunderos del mismo mecanismo (y valga el repeticionismo)? ¿no deberían caminar juntos dos carros tirados por el mismo buey, siempre y en todo caso? ¿es posible que, a mis ignorandas, se esté produciendo un íntimo drama en los interiores de mi Hami? ¿porqué? ¿porqué discrepan así? ¿hay alguna explicación de índole tecnética, o debo considerarlo desde la perpectiva de la cabalística?.
Por si alguna de vuestras sapientísimas almas se apiada de este prurito que hace ya un buen rato que me tiene frito (y de nuevo perdón, que me repito). Expliquen, por favor, el origen de ese desazonante fenómeno.
Pues gracias por si alguien me calma. Saludos. Osinar.